En el cartel que construyó la empresa "Fajuma" se resume la calidad del trabajo de los lamatritenses.

Juanjo saluda y sigue concentrado en lo suyo. El día avanza y para él un pedazo suyo está quedando en esas letras de casi dos metros de alto que se pueden distinguir apenas se ingresa por la avenida Alem.

El artista radicado en La Plata hace casi un mes que está en la ciudad y varios de esos días los insumió en la obra. "Cuando me contaron la idea me encantó, y tenía ganas de venir porque hacía un montón que no estaba en La Madrid. Estar acá, haciendo lo que me gusta y con mi familia y mi gente, me pone muy bien, lo disfruto mucho", resume Juanjo.

"Me contaron la idea de las letras, que las hicieron en Líbano y me gustó la idea", detalla sobre cómo nació el proyecto propiciado por la Municipalidad.

"Me dieron libertad así que iba imaginando y cuando llegué terminé de definir las ideas. Hice un boceto y les gustó. Lo estoy haciendo con mucha libertad y está buenísimo", repite Kauffman.

"No soy buen bocetador, casi que ni lo hago, es más una idea escrita que un dibujo. Fue una idea general, pero sabía que en el ‘vivo’ iba a ser mucho más definido que en el papel", repasa sobre cómo surgió la obra y cómo se transformó desde el papel a la propia obra, en la calle.

Cada una de las letras está construida en chapa y tienen casi 2 metros de altura, en tres dimensiones.

"Nunca había trabajado con este soporte así que fue importante la base que se le dio, que es de calidad, quedó bárbara y arranqué con algo lindo. Me tuve que adaptar porque es un soporte desconocido y aproveché la trama de fondo para ver cómo reaccionaba la pintura y el pincel a la temperatura de la chapa. Los primeros días fueron como una prueba y me gustó, me fui adaptando y me gusta", describe.

Uno de los principales "enemigos" es la temperatura por el reflejo del sol en la chapa de la letra. "Cuando se calienta la pintura se seca enseguida; en otros materiales se hace como un fundido entre colores y acá no se puede hacer porque se seca. Voy trabajando por planos, mezclando los colores afuera y no en el soporte, el color ya está definido", cuenta Juanjo Kauffman.

Evita

Días atrás, en la Legislatura bonaerense se realizó la entronización de una imagen de Eva Perón realizada por el artista lamatritense.

"Me llamaron desde la Universidad preguntándome si me interesaba hacer un retrato de Eva, me contaron que era para la Cámara de Diputados y les dije que sí. Después que se aprobó el proyecto fui a ver los retratos: cómo estaban hechos, sobre qué soportes para que tenga que ver con los que ya estaban. Ahí descubrí que no estaban pintados sobre la pared sino sobre una madera y montados, así que lo pude hacer en mi taller", detalló Juanjo sobre cómo surgió la obra.

"Pinté como lo hago siempre. Me enteré estando acá que la habían entronizado y me puso contento", señaló sobre lo que significó que su obra esté en el Congreso de la provincia de Buenos Aires.

Consultado sobre qué sintió al tener que realizar una obra sobre una de las figuras más emblemáticas de la historia de la Argentina, reconoció que "fue como una presión extra al principio, pero fue hasta que arranqué. Estaba ansioso pero después me fui olvidando".

"Me puse nervioso hasta que conseguí la madera y definieron qué imagen iba a ser, porque quería estar pintando", sumó.

"Es Eva y la conoce todo el mundo, y si hay un gesto que no es el de ella ya te lo remarcan, así que había que estar superconcentrado y errarle en lo menos posible", dijo el artista lamatritense.

"El otro desafío era pasar la imagen a color porque la mayoría están en blanco y negro, y querían a color. Fue un desafío inventar ese color, pero fue muy lindo hacerlo, me encantó porque me dieron libertad y pude jugar un poco con el fondo", cerró Juanjo Kauffman.