"Que nos respeten nuestros espacios, nuestras profesiones y nuestras decisiones"
Belén Vergel, militante de la Unión Cívica Radical, concejal, mamá, docente y abogada, dialogó con El Popular Medios en esta fecha especial, expresando que "siempre he asumido el compromiso de desarrollar los objetivos y cumplirlos de la mejor manera posible".
Si bien Belén nació en Olavarría, desde chica vivió en Laprida en donde asistió a la escuela N.º 3 y a los 12 años se vino a vivir a Olavarría. Finalizó los estudios primarios en la escuela Nº 1 para cursar posteriormente la formación media en la escuela Monseñor César Cáneva. Una vez finalizado los estudios secundarios se trasladó a Buenos Aires para graduase en abogacía en la UBA. Cursó también algunos años de Ciencias Políticas para incursionar luego en un proyecto familiar de "empezar a formar una familia", sostiene Belén Vergel.
"Me vine a Olavarría con mi esposo que también estudiaba en Buenos Aires. Ahí comencé a desarrollarme no solamente en lo profesional sino también hice la carrera docente, estuve dando clases y trabajé en la OMIC de Azul. Fui una de las precursoras en la conformación de la OMIC y presentamos muchos amparos en defensa en ese momento, de los aumentos del agua que había".
Luego del nacimiento de su segundo hijo dejó la docencia para instalarse de lleno en su estudio jurídico, en donde comenzó a desarrollarse profesionalmente, con una fuerte participación en instituciones, involucrada siempre en lo social.
No es casual que hoy la vida la encuentre como flamante presidenta del partido Radical de la ciudad, porque "mi familia siempre fue radical, mi papá participaba en el partido radical de Laprida y siempre me interesó la posibilidad de ingresar en un espacio donde uno pueda aportar y transformar cuestiones de la realidad que uno las ve, con ciertas injusticias, y quedarme quieta ante determinadas problemáticas que pasaban, no me generaban para nada una situación cómoda. Entonces traté de participar donde pude, donde se abrió una puerta, porque consideraba que era importante que todos nos involucremos y que todos veamos qué podemos aportar para cambiar la realidad de mucha gente. Así que la formación dentro de la facultad de alguna manera me llevó a pensar que uno puede seguir desde ese lugar generando pequeños cambios, que tal vez en un futuro se refleje en grandes resultados. Siempre hay que apostar a poder cambiar lo que uno no ve que esté bien", sostiene Belén.
La concejal Belén Vergel se planta como mujer y sostiene que "nunca consideré que era una valla o un impedimento o que me podía llegar a jugar en contra ser mujer. Siempre consideré que tenía que ver mucho con la actitud que uno tomaba o con el compromiso que uno asumía ante determinadas circunstancias o ante determinados eventos de la vida".
Belén es muy enfática al señalar con lo que se ha encontrado en su incursión en la vida política de la ciudad: "lo que sí te encontrás en la política es que la vara con la que te miden no es la misma con la que miden a un hombre. Nosotras es como que recibimos una evaluación constante, a ver si estás capacitada o no, para hacer determinada cosa. Y creo que en la vida política o en la vida pública pasa lo mismo. Se nos exige mucho más desde todos los ámbitos. Desde el ámbito de formación, desde el ámbito de preparación, desde el momento en que tenés que hablar en público y demás, es como que considero que a nosotras se nos está siempre mirando más, evaluando más. Pero depende de cómo es uno. Si esa evaluación a vos te va a generar un freno o una fortaleza para decir bueno, de lo que me está diciendo, de lo que están viendo lo tomo como un aprendizaje y de ahí en más sigo construyendo. Por eso también depende mucho de cómo uno está parado, porque te pueden llegar a derrumbar en tus proyectos si te agarran en una instancia donde personalmente no te encuentres con las ganas de seguir. En algún momento no me sentí con ganas de seguir militando y me aboqué a otros proyectos y cuando me invitan a volver en aquel momento para la vicepresidencia del comité, me pareció una propuesta interesante acompañar desde una vicepresidencia. Y ahí volví a militar, como el primer día. Volví otra vez a asumir ese compromiso que es tan importante y a caminar la calle sin parar, porque considero que la única manera de hacer política, es estar con los pies en el barro, con los pies en la realidad y la única realidad es la calle. No podés militarla de otra manera", sostiene Belén Vergel.
La calle, caminar escuchando a los vecinos "es lo que te da la sensibilidad, que te da para empatizar, para sentir que el problema del otro también es tuyo o lo que le pasa al otro también te puede pasar a vos. Y no sentirte alejado de eso", observó Belén Vergel que agregó: "nosotros no tenemos la solución mágica a todo, no tenemos las respuestas a todo, pero sí podemos tender puentes".
La misma pasión y dedicación puesta al servicio de la política, la vuelca a su familia. Al respecto, Belén Vergel sostiene que "creo que lo más importante para poder hacer política es comprender que los roles de cuidado son compartidos. Si el compañero que tenés no es compañero y no comprende que vos también podés crecer y que vos también podés desarrollarte en otros ámbitos, así quieras poner el mínimo emprendimiento, no lo vas a lograr, porque, estar involucrada en política es lo mismo que estar involucrada en tu comercio, en el comedor del barrio o ser docente. Necesitás el acompañamiento de la familia y que ella entienda que es tu elección y que es lo que vos querés hacer en ese momento de tu vida. Y ahí viene el compañero que te toca, y si ahí él no asume esta cuestión de que sea todo compartido, es inviable. Y si no es inviable cargás con mucha mochila. Imaginate que tenés los chicos, la escuela, el médico de los niños cuando se enferman, el supermercado. Organizar la casa, y arriba tu cabeza pensando en cómo hacer una ciudad mejor, más segura, con más políticas públicas, resolver alguna cuestión de algún barrio y escuchar a alguien que te está llamando por teléfono y que está necesitando una oreja", sostiene la concejal Vergel.
No tiene dudas Belén al señalar que "creo que nosotras tenemos que ser educadoras de esto. Tenemos que empezar a ponernos más firmes y pedir que se nos respeten nuestros espacios, nuestras profesiones y nuestras decisiones. Muchas veces en muchos ámbitos y en conversaciones con amigas les digo que no tenemos que sentar precedentes. Porque donde vos, por tu misma naturaleza, vas y resolvés algo, ya dejás sentado que lo vas a hacer vos la próxima vez. Entonces, si vos tratas de ceder un poco y no ser tan crítica a lo que hacen tus hijos o tu compañero, vas a permitir que el otro lo haga a su manera, a su forma, pero que lo haga. Ahí está toda la convivencia del hogar".
En una sociedad cuya vertiginosidad nos pasa por encima, Belén sostiene que "los tiempos actuales, de todos, los tuyos, los míos, son acotados. Donde vos tenés que ver mucho qué calidad brindás, porque cantidad, generalmente es escasa. En ese contexto en que uno, todos los días se levanta y organiza con la familia, para que cada uno cumpla su rol, haga sus cosas, para que al final del día todo surja como tiene que ser".
Consultada sobre alguna mujer que de algún modo marcó su vida, enfatizó que "una mujer que estuvo en un tiempo muy complejo fue Florentina Gómez Miranda. Justamente hay una frase de ella que a mí me atravesó para comenzar a participar en política: `Si una mujer entra en la política, cambia la mujer. Pero si muchas mujeres entran en la política, la que cambia es la política` ".
Indudablemente la figura de Florentina dejó un importante legado, "una diputada que en el 83 vino a plantearnos derechos que hoy en día estamos debatiendo, estamos poniendo sobre la mesa, fue una gran invitación a todas. Todas debemos entrar a la política para cambiarla. Todas tenemos que generarnos nuestros espacios de participación. Y no hablamos solamente de política partidaria. Pensemos que también podemos participar en el club del barrio, en las sociedades de fomento, en la cooperadora. En todos esos lugares donde nosotras vamos y dejamos nuestra impronta, seguramente va a cambiar la realidad de esa institución. Por eso es importante hacernos nuestro tiempito de participación social. Nuestro tiempito de intercambio con el otro e ir así cambiando pequeñas cosas de la diaria que seguramente va a llevar a una transformación social más grande".
Vergel sostiene que el ser humano es un ser político por excelencia, pero considera que la mujer tiene un plus porque "nosotras a través de los roles que nos ha tocado desempeñar, tanto familiares como sociales, tenemos una llegada mucho más amplia. Creo que también nuestra concepción y nuestra forma de ver -también puede jugar acá el rol de la maternidad-, de esa cuestión de protección que nos da, esa mirada diferente. Por eso, esto que estamos viviendo hoy en día a nivel social, más allá de lo político, no lo cambiamos ni hombres ni mujeres, sino juntos. Creo que también pasa por ahí", señaló Belén Vergel.
La concejal radical logró la presidencia del tradicional partido político, y con mucho orgullo narra que "primero me toca desempeñar un rol que va a ser un hito histórico, porque va a ser la primera vez que una mujer sea presidente del partido Unión Cívica Radical en Olavarría. No se había dado nunca. Y estoy abriendo las puertas a que muchas mujeres más se animen a incursionar en la política, a liderar espacios, a ser protagonistas del lugar que les toque, pero a ser protagonistas. Es una etapa que nos viene para nosotras y la tenemos que aprovechar".
Ser protagonistas, le significa muchas cosas a Belén, "significa también salir de la quietud, salir de ver todo lo que nos molesta, todo lo que está mal para poder decir, puedo ser transformadora de esta realidad. Ser protagonistas es levantar las banderas y ponerse al frente de las batallas. Creo que es un gran momento para que esa transformación social la hagamos con nosotras también. Esto no es de una mujer, sino que es resultado de muchas mujeres. Nosotras solamente podemos lograr grandes cambios sociales, legislativos, cambios radicales, de cuestiones que no vemos que estén bien, si lo hacemos juntas, si lo visibilizamos. Pero vuelvo al punto de partida. Es momento que lo empecemos a caminar todas juntas. Ni ellos ni nosotras, juntos".
Belén es de transitar la calle, hablar con los vecinos, circunstancias que la lleva a conocer cómo están las jóvenes con respecto a la política: "hay algunas mujeres jóvenes que están involucradas y que tienen ganas de participar y creo que tantos años de malas respuestas de la política, de falta de contención social, de falta de escuchas a la juventud, ha hecho que estén apáticos. Los jóvenes en general. Y será un gran desafío para nosotros: volver a enamorar a la sociedad y a ellos y a todos, a que desde la política se pueden hacer grandes cosas".
Para finalizar esta nota, Belén rescata y pone el valor la lucha cotidiana de muchas mujeres: "creo que estar en la política y estar desempeñando este lugar que hoy me toca, no hace que sea nada diferente a lo de cualquier mujer que se levanta a la mañana y le pone el hombro a la vida. Todas de una u otra manera dejamos nuestro aporte social, algunas más visibles y otras no tanto, pero creo que es muy importante revalorizar lo que cada una hace. Porque en muchos casos no es solamente el trabajo, la profesión, sino también es volver a casa, a esa tarea silenciosa que no se ve y que no es remunerada tampoco. O muchas que no han logrado desarrollarse profesionalmente o no han podido conseguir un trabajo que les permita vivir en plenitud y se han quedado adentro de sus hogares manteniendo una estructura familiar que las puede hacer feliz, no digo que no, pero tal vez no les permitieron desarrollarse donde quisieron. A todas ellas las invito a que encuentren ese espacio donde se desarrollen. Que se animen, porque podemos hacer mucho más de lo que nos imaginamos. Es momento de nosotras y ahí tenemos que ayudarnos entre todas. Acá no llega una, llegan todas. Porque cada lucha que se gana no es la de esa mujer sino la de todas. Que yo hoy esté en la conducción de la UCR no es algo mío, es algo de una lucha de muchas mujeres que seguramente han querido estar ahí".