AL MAL MOMENTO DE EDINSON CAVANI SE LE SUMÓ LA PEOR NOTICIA
El uruguayo que encandiló con su llegada y vive un presente futbolístico pobre sufrió un duro contratiempo.
EDINSON CAVANI tuvo en vilo a los hinchas de Boca durante semanas antes de que finalmente se produjera su deslumbrante recibimiento una vez que firmó su contrato tras las maratónicas negociaciones.
Rápidamente se adaptó al Mundo Boca y se convirtió en uno más, inoculado por una inyección de ADN bostero que lo poseyó de inmediato. Hasta salieron a la luz videos del mítico goleador uruguayo en la intimidad del hogar y cantando canciones de la hinchada con su pequeño hijo.
Dentro de la cancha se vio desde el minuto cero su tremendo compromiso para correr a todos, su aporte en el grupo como líder positivo y su humildad para demostrar que, a pesar de su leyenda, llegó para ser uno más. Pero pareció falto de confianza para ejecutar la faena que mejor le sienta y que lo llevó a ser un fuera de serie: convertir goles.
En 16 partidos con la casaca auriazul, sólo pudo marcar en 3 ocasiones, aunque una de ellas fue clave: en la semifinal de vuelta de la Copa Libertadores frente a Palmeiras como visitante. Su tanto sirvió para poner en ventaja a Boca en el Allianz Parque, aunque después llegó el empate del Verdao y el pase a la final mediante los penales, que arrancaron con el que falló el propio Edinson.
En la definición en Río de Janeiro con Fluminense, Cavani ofreció una imagen bastante opaca, sin generar ni siquiera una situación peligrosa y se lo vio visiblemente disconforme con su nivel, sabedor él primero que nadie de la expectativa que genera su presencia. Terminó saliendo del campo a los 78' para el ingreso de Darío Benedetto.
Tras la decepción en Brasil, fue titular en el clásico con San Lorenzo pero volvió a ser una sombra y desperdició un par de chances claras, aunque se mantuvo en el campo de juego hasta el final.
Este domingo estuvo nuevamente desde el arranque con Newell's y a la actuación irregular se le sumó su salida por una molestia muscular que terminó por confirmar la peor de las noticias: no podrá integrar el plantel de la Celeste para la doble fecha de Eliminatorias Sudamericana que arrancará este jueves con el clásico ante Argentina en el Monumental.
A pesar de no haber citado a los históricos en las primeras convocatorias, el DT Marcelo Bielsa sí incluyó entre los reservados para este llamado a Cavani, por lo que su ilusión por volver a vestir la casaca charrúa se derrumbó como un castillo de naipes.
A falta de estudios que corroboren qué tipo de lesión sufre, lo cierto es que no integrará su Selección en los dos últimos partidos de 2023 y además está en duda su presencia para la semifinal de la Copa Argentina que Boca debe disputar con Estudiantes, el anteúltimo peldaño para lograr el cupo a la Libertadores 2024.