El procedimiento se realizó en el cierre de la tarde de ayer en avenida Urquiza y calle 4, en un domicilio ubicado detrás del barrio Nicolás Avellaneda. La medida fue solicitada por la Unidad Funcional de Instrucción Nº 19 de nuestra ciudad, y avalada en las últimas horas por el Juzgado de Garantías Nº 2, a cargo del doctor Carlos Villamarín.

El operativo en el domicilio fue coordinado por el fiscal Lucas Moyano y el subcomisario Fernando Lagano, al frente de la Subdelegación Departamental de Investigaciones Olavarría, y se desempeñaron agentes de esta dependencia, con la colaboración de efectivos del Comando de Prevención Rural (CPR) Olavarría, la subcomisaría de Loma Negra y la división local de Policía Científica. Además se acercó personal de la Dirección Municipal de Bromatología.

De acuerdo a lo que indicaron fuentes vinculadas con la investigación a EL POPULAR, en la vivienda de avenida Urquiza secuestraron 10 bolsas que contenían un total de 22,6 kilos de carne, una bolsa de tela con cuchillos y chairas, algunas de las que tenían restos de sangre, una carabina calibre 22 marca Halcón con 33 municiones y un serrucho, entre otros. También incautaron un pantalón, un par de borceguíes, un par de zapatillas y una soga enrollada que tenían manchas que, según se presumen, también son de sangre.

Acerca de las pertenencias secuestradas, el fiscal Moyano indicó a este Diario que "es muy importante por el hecho de que todo va a ser cotejo de pruebas de ADN para determinar la responsabilidad" de quienes son investigados como los posibles autores de los últimos abigeatos.

Las muestras que fueron tomadas por los peritos en la carne secuestrada ayer serán cotejadas con las relevadas en los abigeatos que sucedieron en los últimos 10 días en campos cercanos a la localidad de Espigas y a la planta L’Amalí. Ese análisis se realiza en los laboratorios de la Universidad Nacional del Centro pero los resultados de los exámenes llegan a demorar hasta alrededor de 9 meses.

Delito en aumento

Específicamente, las instrucciones que lleva adelante la ayudantía fiscal de Delitos Rurales y Conexos a cargo del doctor Juan Agustín Mañero y que integra la Fiscalía 19 avanzan en resolver las carneadas ocurridas el último sábado por la madrugada en dos campos ubicados sobre la ruta 226 en jurisdicción de la localidad de Espigas; y en otro abigeato sucedido 10 días atrás en un predio rural cercano a L’Amalí.

Por otra parte, el titular de la Fiscalía 19 expuso que "estamos en contacto con aquel productor que sufre un hecho, también con la Sociedad Rural para tratar el tema. Estamos preocupados por este incremento que ha habido y esperamos poder dar soluciones". Moyano planteó que este tipo de investigaciones son de gran complejidad, principalmente por las diversas tareas y pesquisas que se deben llevar adelante para la identificación de los autores de las faenadas, además de colectar las pruebas suficientes que permitan imputarlos e iniciar los procesos penales correspondientes sobre los posibles sindicados por estos abigeatos.

"Estamos entendiendo la problemática que hay en el sector y la preocupación de los productores y estamos trabajando para dar con los autores de los distintos hechos", manifestó sobre esta situación el fiscal Moyano a EL POPULAR. Según pudo saber este Diario, si bien no se descarta que la carne secuestrada pueda ser de los animales faenados el último fin de semana sobre la ruta 226, la principal hipótesis que manejan los investigadores es que se trataría de cortes de las dos vacas preñadas que fueron carneadas el 6 de junio en un predio rural ubicado a pocos metros de la planta L’Amalí.