La Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) ha sido blanco de una nueva amenaza de bomba el 6 de diciembre. Ante esta alerta, la Superintendencia de Investigaciones Federales de la Policía Federal Argentina y la Policía de la Ciudad han unido esfuerzos para llevar a cabo la detección de explosivos.

 El correo electrónico que contenía la amenaza fue recibido en las oficinas administrativas de la AMIA e incluía también una advertencia de bomba dirigida a la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA). Las autoridades ya cuentan con el contenido del mensaje y se encuentran investigando su origen y autenticidad.

El despliegue de las fuerzas de seguridad en la AMIA tras la amenaza de bomba

La Comisaría Vecinal 3 C de la Policía de la Ciudad se desplazó hasta la AMIA, ubicada en el barrio porteño de Balvanera, en Pasteur 633, ante la confirmación de la amenaza.

Mientras la Policía Federal realiza una exhaustiva revisión en busca de explosivos, las fuerzas de seguridad porteñas controlan el perímetro del lugar. El juez federal Ariel Lijo quedó a cargo del caso y lo caratuló como “delito de intimidación pública”. 

Asimismo, encomendó a la Dirección General de Seguridad de Estado de la Superintendencia de Investigaciones Federales de la PFA la tarea de analizar los metadatos de los correos electrónicos para identificar a los autores de la amenaza. 

Cabe recordar que la AMIA ha sido históricamente un objetivo sensible debido al devastador atentado de 1994. Frente a este tipo de amenazas, se refuerza el monitoreo constante de posibles riesgos en lugares emblemáticos. **Noticia en desarrollo...**