Durante el primer semestre de 2024, las importaciones de soja  para la industria ascendieron a 2,2 millones de toneladas, por un costo CIF (valor real de las mercancías durante el despacho aduanero) de u$s980 millones. Paraguay, el responsable del 95%, según explicó la Bolsa de Comercio de Rosari

El  volumen de las importaciones se explica en parte por caída de la producción causada por  la sequía de la campaña anterior que genero una merma de 50% en la producción. Sin embargo, entre abril y junio se embarcaron 13,2 millones de toneladas de poroto, harina y aceite de soja, el mayor volumen exportado desde el año 2020.

Para Dante Romano, profesor e investigador del Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral,. Según analistas del mercado, el incremento en las importaciones no se debe a una menor venta por parte de los productores locales, sino a una mayor demanda de molienda.