"Desde 2015, la administración Cambiemos modificó radicalmente la evolución tributaria anterior, para virar hacia una mayor regresividad", analizó el estudio.

El trabajo elaborado por el Centro Proyecto Económico, integrado por técnicos vinculados con legisladores kirchneristas, puntualizó que en los últimos tres años "disminuyó sistemáticamente la recaudación por impuestos a la propiedad, a los ingresos, y al comercio exterior".

"La participación de los impuestos que gravan la riqueza y los altos ingresos empeoró drásticamente, pasando de representar el 38% de la recaudación en 2015 a sólo el 30,7% en 2018", precisó.

Indicó que, "paralelamente, se incrementó la imposición al consumo, que pasó de representar el 46% en 2015 al 55,3% en 2018".

Sostuvo que "el costo de una menor recaudación y del peor perfil tributario de la Argentina, justificó un vertiginoso endeudamiento en divisas para financiar un déficit fiscal creciente a pesar del ajuste sobre el gasto, para el cual el Gobierno no contempla su impacto recesivo sobre la demanda agregada".