El estudio fue realizado en 670 puntos de venta, a pesar de la retracción registrada en junio, el semestre cerró con una suba de 3,6% en el consumo debido a los números positivos de los primeros meses de la cuarentena.

Luego de iniciar enero y febrero en baja, el consumo había tenido una fuerte suba de 16,6% en marzo por el acopio que generó el inicio de la cuarentena, y luego había subido a menor ritmo, 9,8% en abril y 2,8% en mayo.

Bebidas es la categoría que más cayó en el último mes, con una baja a dos dígitos en  11,9%, y es la única que pierde consumo en el acumulado del año (-3%); mientras que las ventas de productos de limpieza cayeron 1,5% en junio pero crecieron 12% en lo que va del año.

En tanto, alimentos ganó en junio 2,5% y acumuló en lo que va del año un incremento de 9,9%; y cuidado personal subió 2,3% en junio y acumuló una mejora de 10% en el primer semestre.

El valor del ticket promedio en junio fue de $460 con seis unidades promedio en puntos de venta de hasta 500 m2, y el gasto en alimentos es el que más creció en valor y unidades a partir del aislamiento obligatorio, seguido por la compra de limpieza.

El 45% de los consumidores compra los días viernes, sábados y domingos y se privilegian los horarios de la mañana y hasta el mediodía para realizar las compras (53%), opuesto al modo en que se hacía un año atrás, cuando la mayor concentración se daba en la tarde/noche.

De acuerdo con un informe anterior de la consultora, los precios desaceleraron su aumento a 1% en junio al "encontrar un techo para el aumento en el actual escenario recesivo, con caída del ingreso de las personas y hogares, actividad económica restringida en AMBA y disminuida en el Interior del país".