La última medición realizada por la Defensoría de la Tercera Edad de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires revela un preocupante incremento en la canasta básica de los jubilados, que ha alcanzado un valor de $685.041 al mes de marzo. Esta cifra representa un aumento del 239% en los últimos 12 meses y un incremento del 118,73% respecto a la medición de octubre del año anterior. Mientras tanto, la inflación estimada para el mismo período rondaría el 300%, según datos de consultoras privadas.

La brecha entre esta canasta básica, cercana a los $700.000, y la jubilación mínima actual de casi $134.445, es de aproximadamente $550.000. Sin embargo, con el bono de refuerzo de $70.000, esta diferencia se reduce a $480.000.

Es importante destacar que el haber medio de los jubilados que no accedieron a moratorias es de $299.407, es decir, menos de la mitad del valor de la Canasta Básica Estimada. Por otro lado, la Pensión para Adultos Mayores (PUAM), dirigida a personas mayores de 65 años que no cumplen con los requisitos de aportes para la jubilación ordinaria, se sitúa actualmente en $107.556,24. Con el bono de refuerzo de $70.000, el monto total a cobrar alcanza los $177.557.

La canasta básica de los jubilados se compone de varios rubros, incluyendo vestimenta, recreación, servicios, transporte, limpieza, vivienda, farmacia y medicamentos, y alimentos. Destaca que el rubro de medicación representa una importante porción del gasto, con un valor de $153.937, considerando el descuento que se realiza en farmacias según la obra social del jubilado, que oscila entre el 40% y el 80%.