La Sala I de la Cámara de Apelaciones de Lomas de Zamora ha decidido mantener la prisión preventiva para tres de los imputados por el crimen de Fernando Pérez Algaba, el empresario hallado descuartizado en Ingeniero Budge. Matías Ezequiel Gil, Luis Alberto Contreras y Fernando Gastón Martín Carrizo serán liberados después de que la Cámara revocara sus procesamientos iniciales.

El fallo confirma la resolución de septiembre pasado del juez de Garantías 4 de Lomas de Zamora, Sebastián Monelos, quien procesó con prisión preventiva a Maximiliano Ezequiel Pilepich y Nahuel Sebastián Vargas como "coautores" del homicidio calificado de Pérez Algaba, y a Horacio Mariano Córdoba como "partícipe secundario".

La Cámara argumentó que Gil y Carrizo no pueden considerarse "coautores del homicidio" ya que no realizaron los disparos que mataron a la víctima y, si bien pudieron haber ayudado después del homicidio, no está probado que esa conducta obedeciera a una promesa anterior. Respecto a Contreras, se encuentra en la misma situación.

Los magistrados indicaron que, en relación a Gil, Carrizo y Contreras, "no existe imputación alternativa", por lo que corresponde revocar el auto impugnado. No obstante, sugirieron que el fiscal puede formalizar una nueva imputación.

En el caso de Pilepich y Vargas, la Cámara sostuvo que son las únicas dos personas presentes cuando Pérez Algaba recibió los disparos mortales, considerándolos "probables coautores penalmente responsables del delito de homicidio agravado por codicia y alevosía y por haberse cometido mediante el empleo de un arma de fuego". A Córdoba lo consideraron "partícipe secundario del delito de homicidio agravado por codicia".

El juez Monelos había señalado previamente la existencia de una empresa criminal entre los seis acusados, con roles específicos para cada uno. El fiscal Marcelo Domínguez había solicitado el procesamiento con prisión preventiva para los seis acusados, pero la Cámara ha modificado esta decisión liberando a tres de ellos.

El crimen de Pérez Algaba se atribuye a una deuda de 50,000 dólares y 17 terrenos que Pilepich debía entregar al empresario. Pérez Algaba fue citado al predio "Renacer" de General Rodríguez, donde fue asesinado y posteriormente descuartizado. Los restos descuartizados fueron encontrados en Ingeniero Budge.