La designación de Luis Lucero como Secretario de Minería de la Nación ha desatado una serie de tensiones en el seno del Gobierno argentino, especialmente entre el ministro de Economía, Luis Caputo, y el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, debido a las diferencias en torno a un proyecto clave para el sector minero.

Conflicto interno en el Gobierno argentino por postergación de proyecto minero

La llegada de Lucero, quien es percibido como representante de los intereses tradicionales de la minería asociados con la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM), ha generado conflictos internos en el gobierno, especialmente en relación con la postergación de un proyecto para tokenizar la industria minera.

Este proyecto, impulsado por el otro candidato a ocupar la cartera de Minería, Pablo Rutigliano, busca utilizar la tecnología blockchain para transparentar las transacciones y contratos asociados con las operaciones mineras en Argentina. Sin embargo, la elección a favor de Lucero ha frenado el avance de esta iniciativa, ya que él y la CAEM no están a favor de la tokenización, argumentando posibles conflictos con grandes mineras y otros actores del sector.

La propuesta de tokenización busca crear un Mercado de Metales y Futuros Digital basado en la tecnología blockchain, que permita establecer precios de referencia transparentes para los commodities que se comercializan en el país. Esto incluiría minerales como el litio, el cobre y la plata, entre otros.

En la actualidad, la decisión de mantener el modelo tradicional de la industria minera ha generado tensiones internas en el gobierno, especialmente ante el descenso internacional en el valor del litio y la falta de controles sobre las gigantes mineras en el Noroeste Argentino. Esta situación ha agudizado las discrepancias entre Caputo y Posse, generando un clima de incertidumbre en el seno del Gobierno.