Día del Celíaco: estiman que en el país hay ocho de cada diez que no tienen diagnóstico
En el marco del Día Internacional de la Enfermedad Celíaca, que se conmemora hoy, especialistas hacen hincapié en la importancia de acceder al diagnóstico en forma oportuna.
Se estima que uno de cada 100 argentinos tiene celiaquía, pero la mayoría de ellos (entre 8 y 9 de cada 10, según las estimaciones) no lo sabe, aunque su calidad de vida se ve alterada por las molestias que produce la enfermedad, como diarrea, dolor de panza y pérdida de peso, entre otros. Por eso, en el marco del Día Internacional de la Enfermedad Celíaca, que se conmemora hoy, especialistas hacen hincapié en la importancia de acceder al diagnóstico en forma oportuna.
Es que la detección es el primer paso para iniciar el tratamiento, que no es otro que modificar la alimentación, dado que la enfermedad celíaca se da por la intolerancia permanente al gluten, una proteína que se encuentra en el trigo, avena, cebada y centeno (TACC), que afecta al intestino delgado de las personas con predisposición genética.
Puede aparecer en cualquier momento de la vida, desde que se incorpora gluten a la alimentación hasta la adultez avanzada. "Esta es una enfermedad con tantos síntomas que muchas veces se confunde con otras y se demora su diagnóstico", advierte Luzuriaga la médica gastroenteróloga Guadalupe Luzuriaga. "Por eso es muy importante el índice de sospecha, la concientización y visibilización de la enfermedad", añade.
En la misma línea, la licenciada en Nutrición y miembro del Consejo Directivo del Colegio de Nutricionistas de la Provincia de Buenos Aires, Andrea Baistrocchi, subraya que "es fundamental su diagnóstico temprano para el tratamiento oportuno y así evitar complicaciones".
Síntomas y señales de alerta
Diarrea crónica, distensión y/o dolor abdominal, pérdida de peso y desnutrición son algunos de los síntomas típicos pero también existen otros que pueden ser indicio de la enfermedad: anemia, infertilidad, pérdida de embarazos recurrente, talla baja, alteraciones del esmalte dental, aftas recurrentes, dermatitis herpetiforme, entre otros.
En ese sentido, Lorena Bortot, médica de planta de Gastroenterología y coordinadora del Consultorio de Enfermedad Celíaca del Hospital de Clínicas José De San Martín, apunta que hoy en día la enfermedad se presenta más frecuentemente con manifestaciones extradigestivas o patologías asociadas, que incluyen "desde síntomas abdominales inespecíficos y variables, hasta anemia por déficit de hierro, trastornos óseos como la osteoporosis, alteración de las enzimas del hígado y las enfermedades tiroideas. Otras manifestaciones extradigestivas que pueden estar relacionadas con la enfermedad celíaca son la depresión y la fatiga crónica".
Coincide Luciana Guzmán, integrante del Comité de Gastroenterología de la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP). "Hay muchos pacientes que llegan al servicio de Gastroenterología derivados de otras áreas en donde como hoy se sabe más de la relación entre enfermedades autoinmunes y celiaquía, se piden consulta con nuestro servicio para hacer estudios de anticuerpos".
Y añadió: "Es el caso de los chicos con diabetes tipo 1, hipotiroidismo, vitiligo, psoriasis, anemia refractaria al tratamiento o trastornos del ciclo menstrual".
El diagnóstico
La celiaquía es una enfermedad sistémica en personas genéticamente predispuestas, quienes al ingerir gluten generan una reacción autoinmune que produce un daño de las vellosidades del intestino delgado. Entre el 0,6% y el 2% de la población mundial la padece, de la cual un 60% son mujeres.
Si bien la enfermedad celíaca se puede presentar a cualquier edad, la última Encuesta sobre Prácticas y Percepciones de la Comunidad Celíaca acerca de los Alimentos Libres de Gluten realizada por el Ministerio de Salud en 2020 reportó que en el país 1 de cada 167 personas adultas son celíacas, mientras que en niños y niñas la prevalencia asciende a 1 de cada 80. Se estima, además, que la mayoría no lo sabe.
Entre las causas del subdiagnóstico aparecen la falta de síntomas específicos, no acudir al médico o que este último no sospeche la enfermedad por lo variable de su forma de presentación.