Dolores Etchevehere, la hermana del exministro de Agroindustria del macrismo, Luis Miguel Etchevehere, defendió los objetivos del Proyecto Artigas, la iniciativa agroecológica que atraviesa la disputa por la herencia de su familia y el uso del predio en litigio en la localidad de Santa Elena, provincia de Entre Ríos.

"El Proyecto Artigas tiene tres pilares fundamentales que son justicia, verdad y reparación. Arranca con el caso Etchevehere, pero buscamos extenderlo con una convocatoria a los sectores despojados y humildes, a las mujeres que son oprimidas o silenciadas y a todos aquellos y aquellas que consideren que sus derechos fueron vulnerados", señaló Dolores en una entrevista con Télam.

Integrado por campesinos sin tierra, militantes, técnicos y organizaciones ambientalistas, el Proyecto Artigas se propone "trabajar la tierra respetando la naturaleza, sin envenenarla", puntualizó Etchevehere.

Metas y objetivos del Proyecto Artigas

"Nuestros objetivos son producir alimentos sanos y transitar este camino que va a ser muy arduo para lograr el objetivo de la soberanía alimentaria. Yo insisto: no puede ser que en un país como Argentina, en un mismo pueblo, en una misma ciudad, en ese mismo país, haya un chico que no coma y otro chiquito que sí. Que un niño no tenga un techo y otro sí. Eso está mal, muy mal y no puede ocurrir. Por eso nosotros tenemos como objetivo producir alimentos a precios justos, en el que también haya ganancia con las ventas. Hay que abrir el plano, abrir las oportunidades; tenemos un país maravilloso, con espacio para todos".

"Maniobras de poder"

Dolores valoró asimismo como un "primer logro" el fallo que frenó el desalojo del predio que litiga con su familia, pero advirtió que "del otro lado hay maniobras de una trama de poder muy fuerte" de protección judicial, política y mediática que, según denunció, no acata la medida y persiste en "actos intimidatorios".

Etchevehere denunció ante Télam que su hermano no acató la decisión del juez Raúl Flores que resolvió no hacer lugar al pedido de desalojo del predio en disputa en el marco de un juicio sucesorio en la localidad de Santa Elena, provincia de Entre Ríos. "Puso un candado en la tranquera que da a la ruta en una actitud amenazante; es otro signo de su violencia", advirtió.

¿Cómo entendió la resolución de la Justicia que frenó el desalojo?, se le preguntó. "Lo entendemos como un primer logro, pero debemos ser muy prudentes... Del otro lado hay maniobras de un poder muy fuerte, un poder constituido por parte de la Justicia, parte del sector político, parte del sector privado, de gente poderosa. Hay una trama compleja del otro lado. Ahora insistimos en que no están acatando lo que resolvió el juez: los demandados siguen en un acto intimidatorio.

Luego de la resolución del juez, Luis Miguel Etchevehere puso un candado en la tranquera que da a la ruta, en una actitud amenazante; es otro signo de su violencia". Sobre la conexión de Grabois en el camino de la judicialización, aclaró: "No fue una decisión de un día para el otro. Si tengo que tomar un punto de referencia o un disparador, fue cuando leí la encíclica Laudato Si del papa Francisco. Allí hay un concepto sobre la cultura del descarte y me sentí muy identificada; no solamente sobre el descarte hacia las mujeres, sino además en lo que hace a la cultura del descarte a los que trabajan la tierra".

Sobre la presunta "protección judicial y mediática" en Entre Ríos comentó: "Sí, en Entre Ríos y también a nivel nacional a través de los medios hegemónicos de comunicación. Yo veía que medios como Clarín, La Nación, Canal 13, difundían sus crónicas y silenciaban todo. Pero soy una mujer muy positiva y digo ´si un camino se cierra, tomo el de al lado y transito igual´: comencé a relacionarme y a transmitir por radios comunitarias, pequeños medios de comunicación".

(Fuente www.perfil.com)