El jefe de Gabinete de la Nación, Nicolás Posse, adelantó en su primer informe de gestión al Congreso que el gobierno no tiene en agenda la dolarización de la economía, sino que apunta a implementar un régimen de "competencia de monedas". Esto surge como resultado del proceso iniciado en diciembre, enfocado en sanear la hoja de balance del Banco Central.

Se espera que funcione un sistema en el que convivan diversas monedas, permitiendo a los ciudadanos elegir la moneda para realizar transacciones. Este enfoque requiere condiciones macroeconómicas sólidas, incluyendo un marco fiscal disciplinado, acumulación de reservas y reducción de pasivos del Banco Central.

En cuanto al dólar oficial, el gobierno no planea modificar el esquema de devaluación por goteo del 2% mensual durante el año 2024. Sin embargo, sí se ajustará la tasa de interés para normalizar la política monetaria y reducir la inflación.

El documento enviado al Congreso no establece plazos precisos para la implementación de la competencia de monedas ni para cambios en la tasa de interés, destacando la necesidad de mantener la estabilidad económica y el control de la inflación.