Una posible reclasificación de Argentina como mercado emergente por parte del proveedor de índices MSCI podría impulsar un flujo de casi US$ 1.000 millones en inversiones hacia las acciones argentinas, según un informe reciente de JPMorgan. Actualmente, MSCI clasifica a Argentina como un mercado independiente, fuera de su conjunto de índices de mercados emergentes, luego de haber relegado al país en noviembre de 2021 debido a problemas de accesibilidad al mercado y estrictos controles de capital.

De acuerdo con JPMorgan, si Argentina volviera a ser incluida en el índice MSCI de mercados emergentes (EM), el país podría obtener un peso estimado del 0,2%, ubicándose entre Colombia y Perú en dicho índice. Las posibles entradas de capital se estiman en cerca de US$ 1.000 millones, con US$ 786 millones provenientes del Índice Estándar y US$ 176 millones adicionales del Índice de Pequeñas Capitalizaciones (small caps).

Entre las empresas que podrían formar parte del índice MSCI Argentina Standard se encuentran YPF, Grupo Financiero Galicia, Banco Macro y Pampa Energía, mientras que el índice MSCI Argentina Small Cap incluiría once componentes.

El informe de JPMorgan resalta que el regreso de Argentina a la categoría de mercado emergente podría ocurrir si se levantan las restricciones de capital, un tema que el ministro de Economía, Luis Caputo, y el jefe del Banco Central, Santiago Bausili, discutieron en una reunión con bancos locales. Si bien Caputo y Bausili han señalado que estos controles se levantarán, han enfatizado que lo harán "sin prisa", esperando que las condiciones macroeconómicas se estabilicen y las reservas cambiarias mejoren.

MSCI generalmente anuncia cualquier cambio en su clasificación de países durante su Revisión de Clasificación de Mercado, programada habitualmente para junio, tras un proceso de consulta con los inversores. JPMorgan anticipa que la relajación de las restricciones podría comenzar a materializarse en el cuarto trimestre de 2024, lo que aumentaría la posibilidad de una reclasificación.

La entrada de capital esperada como resultado de una mejora en la clasificación de Argentina en el índice MSCI sería un impulso significativo para el mercado accionario del país, especialmente en un contexto donde las empresas necesitan financiamiento y apoyo para enfrentar los desafíos económicos actuales.