El Gobierno argentino ha dispuesto una significativa modificación en el tratamiento fiscal de las propinas mediante el decreto 737/2024. Esta medida, anunciada el 16 de agosto de 2024, establece que las cuentas destinadas exclusivamente a recibir propinas estarán exentas del impuesto a los débitos y créditos bancarios, conocido como impuesto al cheque.

El decreto aclara que las "cuentas recaudadoras especiales" utilizadas únicamente para gestionar propinas serán las beneficiadas por esta exención. Esta decisión se enmarca dentro del Decreto N° 731/24, que obliga a los comercios a permitir el pago de propinas a través de medios electrónicos.

La medida, desarrollada en conjunto por el Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, el Ministerio de Economía, la Secretaría de Trabajo y el Banco Central, busca facilitar la práctica del pago electrónico de propinas, que hasta ahora enfrentaba barreras debido a su consideración como remuneración bajo la Ley de Contrato de Trabajo. Esto elevaba los costos para los empleadores y desincentivaba el uso de métodos electrónicos.

Cambios y Beneficios

Esta exención beneficiará especialmente a trabajadores de sectores como el gastronómico, turístico, expendedores de combustibles y actividades de reparto. En el futuro, se espera ampliar esta medida a otros sectores. La decisión también busca contrarrestar la reducción en el monto de propinas recibido debido al creciente uso del dinero electrónico.

Con el nuevo decreto, las propinas podrán ser depositadas directamente en una cuenta del trabajador o en una cuenta especial del comercio, la cual será transferida a los trabajadores en un plazo de 24 horas sin descuentos ni deducciones. Los consumidores podrán pagar propinas mediante escaneo de QR y utilizando tarjetas de débito, crédito o billeteras virtuales, sin que los comercios ni los medios de pago realicen retenciones.

Objetivo y Expectativas

El presidente Javier Milei subrayó que esta medida es parte de un esfuerzo por eliminar obstáculos burocráticos e impositivos que limitaban la implementación de pagos electrónicos de propinas. Según el Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, la intención es que más de un millón de trabajadores de estos sectores se beneficien sin enfrentar inconvenientes adicionales.