El riesgo país sigue subiendo y se acerca a los 1000 puntos
Las dudas de los inversores sobre el futuro político de la Argentina y la posibilidad de que el país no pueda hacer frente a sus vencimientos a partir de 2020 hicieron que el miércoles el riesgo país se disparara a 963 puntos básicos, un alza del 11%. Pero la sangría no se frenó.
Este jueves, los bonos argentinos en Nueva York caen hasta 1,60%. El bono en dólares que vence en 2021 es el más golpeado: tiene un rendimiento del 19,30% (el bono del Tesoro a 10 años en Estados Unidos rinde 2,4%) y los seguros contra default a 5 años vuelven a elevarse hasta los 1.300 puntos.
La caída de los bonos hace que el riesgo país suba: avanza 3,90%, a 987 puntos básicos (el riego país es el sobreprecio que tiene que pagar un Estado con relación a los bonos norteamericanos para poder endeudarse). Para encontrar un valor similar hay que remontarse al 10 de febrero de 2014, cuando llegó a 984 puntos, tras la devaluación de Axel Kicillof.
¿Qué hizo que ayer el riesgo país saltara 11% y que hoy el rojo no se detenga? Al contexto internacional negativo, que hizo que el dólar se fortaleciera en todo el mundo y los inversores salieran de los mercados más riesgosos, se suma el ruido político local, donde empiezan a circular encuestas que le otorgan a Cristina Kirchner chances de derrotar a Mauricio Macri en las elecciones de octubre.
"La debilidad de los mercados cambiarios de países emergentes junto con el escepticismo de los inversores en torno a las recientes medidas anunciadas por el Gobierno de Macri para abordar la inflación persistentemente elevada están castigando a los activos argentinos", sostuvo Ilya Gofshteyn, estratega cambiario de Standard Chartered en Nueva York, a la agencia Bloomberg. "El contexto político interno es, sin duda, un motivo de preocupación conforme nos dirigimos a las elecciones".
En tanto, Mauro Roca, director de mercados emergentes en TCW, cree que "la incertidumbre electoral impulsará los precios de los activos en el corto plazo. Los mercados están reaccionando adversamente ante la posibilidad de un retorno de una administración populista. En este momento, nadie puede proyectar con certeza el resultado de las elecciones presidenciales".
"Paradójicamente, la volatilidad financiera alimentada por el riesgo de retorno del populismo funciona en contra del esfuerzo de estabilización que persigue Macri. Esto a su vez eleva las posibilidades de victoria de un candidato populista", agrega Roca. "El Gobierno debe tratar de romper este círculo vicioso político-económico lo antes posible para mantener la competitividad en las elecciones presidenciales. Entretanto, los precios de los bonos podrían seguir ajustándose a la baja hasta que incorporen una alta probabilidad del peor caso".
Shamaila Khan, jefa de deuda de mercados emergentes de AllianceBernstein en Nueva York opinó que la ola de ventas de bonos argentinos "está impulsada por el fuerte posicionamiento de los inversores que subestimaron el riesgo electoral. Pensamos que el riesgo electoral no estaba contabilizado adecuadamente este año y ya no creemos que sea así". (Fuente: Clarín)