La directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, advirtió que "el gran riesgo" que tiene la Argentina es su elevada inflación.

"El gran riesgo es la inflación, que también ha sido empujada por factores exógenos. Por lo tanto, una gran parte de la atención será colocada en tratar de bajar la inflación, para que la gente en la Argentina tenga confianza para ahorrar en su propia moneda", consideró.

En conferencia de prensa que brindó desde Washington, Georgieva resaltó que "tenemos un objetivo común con el nuevo programa: que pueda ser implementado en forma exitosa para ayudar a la gente de Argentina. Y en ese sentido, la implementación debe incluir un recálculo que tome en cuenta el impacto de los cambios globales sobre la Argentina, porque es un exportador de materias primas".

"Respecto de la primera revisión, se ha adelantado, así que pronto habrá noticias del staff técnico tras dialogar con las autoridades argentinas acerca de su progreso", añadió.

A su criterio, "hay tres formas de controlar la inflación: primero, ajustar la política monetaria de los bancos centrales; segundo, ante el creciente riesgo alimentario, hace falta una acción global y tercero, ante el aumento de la deuda por el aumento de las tasas de los bancos centrales, los Gobiernos necesitan medidas para reforzar sus balances fiscales con decisiones tributarias más equilibradas".

A nivel global, la titular del Fondo Monetario consideró que por la guerra en Ucrania habrá "menos crecimiento y más inflación, ya que se generó la división política más fuerte que la de los últimos 75 años. Por lo tanto, el fin del conflicto tendrá el mejor efecto de ayudar a la recuperación de la economía mundial".

"Ya ayudamos a Ucrania con U$S 1400 millones y habrá más recursos para la reconstrucción de ese país y algunos vecinos afectados, por la gran llegada de refugiados", enfatizó.

Georgieva se refirió también a la asamblea del FMI que se realiza esta semana en la capital norteamericana: "Nos reunimos en un momento trascendental para el mundo, ante una crisis sobre crisis. La guerra encima de la pandemia. Es como ser golpeado por otra tormenta antes de que nos hayamos recuperado de la última. El resultado es un enorme revés para la recuperación mundial", alertó.

El FMI recortó su revisión de crecimiento mundial al 3,6% tanto para este año como para 2023. "Esto se debe en gran medida a la invasión de Rusia en Ucrania y su impacto en todo el mundo. Lo primero y más importante, por supuesto, es el terrible sufrimiento humano que ha causado al pueblo ucraniano. Otra consecuencia es la aceleración de la inflación, que se ha convertido en un peligro claro y presente para muchos países", señaló la funcionaria.

En ese sentido, dijo que el aumento de los precios de los alimentos y del combustible "está poniendo a prueba los presupuestos de las familias".

También, evaluó que "la restricción financiera, el elevado endeudamiento y los frecuentes y amplios cierres en China -que provocan nuevos cuellos de botella en las cadenas de suministro mundiales- son otros nubarrones que pesan sobre la economía mundial".

"Y veo que hay una más en el aire: el riesgo de fragmentación geopolítica, que podría poner en peligro los logros del desarrollo de los últimos 75 años y dejarnos incapaces de abordar otros desafíos globales urgentes, como el cambio climático", indicó. (NA)