La lluvia trajo alivio al norte de Corrientes y Misiones
VIDEO. La alegría de los brigadistas y bomberos es completa. Los incendios comenzaron a cesar. Las pérdidas son catastróficas e irreparables. Esperan que las lluvias continúen.
La intensa lluvia que se desató pasadas las 16 trajo alivio a los bomberos y brigadistas que estaban trabajando en los focos de incendio que aún están activos en Misiones y el norte de Corrientes.
Esta tarde se desataron chaparrones y tormentas. Desde las 17, en algunos puntos de Corrientes, Apóstoles y Posadas las precipitaciones son fuertes y hay alerta para varias localidades de Misiones.
En Santo Tomé comenzó a llover a las 16.15 de forma intensa y la gente salió a la calle a recibir la lluvia que tanto se hizo esperar. Los chicos jugaban a la pelota en una canchita y siguieron jugando bajo la lluvia.
Cerca de las 17 empezaron a regresar las autobombas y camionetas con bomberos de todo el país que se hicieron sentir por las calles de Santo Tomé a pura bocina y sirena. Entre ellos, el olavarriense Carlos Manfurt.
Los dos grandes focos que quedaban en Santo Tomé eran los ubicados en la ruta provincial 40 (que va del empalme hacia Pellegrini) a estancia Casualidad, y también al campo de Metrechen. Minutos después, las llamas alcanzaron nuevamente a San Benito y a la estancia Pirizal (conocido también como Tres Taperas), también por ruta 40, a unos 45 kilómetros del casco urbano de Santo Tomé. Según indicaron los bomberos los focos se fueron controlando y esperan que siga la lluvia mañana y pasado.
En los alrededores de Virasoro llovió de forma intensa pero no así en el casco céntrico, donde llovía de forma intermitente. Igual los bomberos esperan que con el trascurrir de las horas y la lluvia se contengan los focos.
En Ituzaingó la lluvia todavía no se hizo sentir. A las 15, cayeron unas gotas por espacio de 15 minutos y luego paró. Volvió a llover pasadas las 17, pero todavía no de forma intensa.
En Azara la lluvia ayudó a apagar el fuego en la chacra 275 de la familia Pietrowski. Gracias a la colaboración de los bomberos de la Policía, empleados Municipales y vecinos de Azara se había controlado y luego la lluvia terminó de enfriar la chacra y los pinares.
La luvia trajo tranquilidad a Candelaria y Santa Ana donde había registros de pequeños focos.
En Concepción de la Sierra, las ráfagas de viento provocaron la caída de postes por lo que la ciudad esta sin servicio de energía. Desde la Cooperativa trabajan para reponer el poste y el servicio.
Con información de elterritorio.com.ar