La Secretaría de Política Económica ha informado que los precios minoristas experimentaron un aumento del 3,1% durante la última semana de noviembre, consolidando un periodo de inflación creciente en la gestión del Ministro de Economía saliente, Sergio Massa.

La variación intermensual, comparada con la misma semana de octubre, cerró con un incremento cercano al 11%, marcando una cifra de dos dígitos. Este aumento se produce a pesar de medidas como el mantenimiento de un tipo de cambio oficial por debajo de la inflación general, tarifas de servicios públicos congeladas y una brecha cambiaria que supera el 140%.

El deterioro de la situación financiera comenzó a afectar al mercado minorista con la desarticulación de Precios Justos, y el Gobierno saliente se vio obligado a autorizar aumentos en los combustibles para evitar situaciones de desabastecimiento.

Se proyecta que la tasa de inflación de noviembre podría superar el 11%, y estimaciones de consultoras privadas sugieren que podría llegar al 13% mensual, incluso superando los registros observados en los meses posteriores a la devaluación de agosto y septiembre.

Para diciembre se anticipa un salto significativo debido a la liberalización de la inflación reprimida durante la gestión de Massa. Este fenómeno se espera que impacte en los costos inflacionarios reprimidos artificialmente en los últimos años, particularmente durante los 16 meses de la gestión de Massa.

Es importante destacar que, a pesar de las medidas para frenar la emisión directa del Banco Central a partir del 10 de diciembre, se prevé que la tasa de inflación continúe en aumento debido a la cantidad de pesos que aún circulan rápidamente en la economía. La inflación se presenta como uno de los desafíos heredados de la gestión saliente.