En una jornada histórica para la política argentina, el Senado aprobó la Ley Bases, la mayor reforma legislativa en décadas, bajo el liderazgo del presidente Javier Milei. A pesar de contar con el bloque oficialista más pequeño de la historia, con solo 7 senadores de La Libertad Avanza, el proyecto recibió el apoyo necesario gracias a un notable esfuerzo de coalición.

La votación en general en la Cámara alta resultó en un empate 36 a 36, lo que llevó a la vicepresidenta y titular del Senado, Victoria Villarruel, a ejercer su rol de desempate, inclinando la balanza a favor de la ley. Esta situación marcó un momento sin precedentes en la historia legislativa del país.

La coalición de apoyo incluyó no solo a los senadores de La Libertad Avanza, sino también a miembros del PRO, casi toda la UCR, y varios senadores peronistas anti-Kirchneristas. En contraste, la oposición estuvo conformada por 33 senadores kirchneristas, los santacruceños José María Carambia y Natalia Gadano, y el radical Martín Lousteau.

Durante la votación en particular, los Títulos 1 y 2 también enfrentaron empates 35 a 35, ya que Carambia y Gadano abandonaron el recinto, y el radical Abad se unió a Lousteau para votar en contra. Villarruel intervino nuevamente para desempatar.

Los Títulos 3 a 6, que incluyen temas como la obra pública-privada, la regularización del empleo en negro, la reforma laboral, y la desregulación energética, fueron aprobados con mayor facilidad, con una votación de 37 a 33. Los senadores Abad y Lousteau cambiaron su posición, votando a favor, mientras que Carambia y Gadano se mantuvieron ausentes.

El Título 7, que introduce el sistema de beneficios para grandes inversores (RIGI), recibió un apoyo inesperado y se aprobó con una votación de 38 a 32, superando las expectativas y resaltando la división en la oposición.

La discusión sobre el Título 8, referente a la reforma previsional que elimina la moratoria de jubilados sin aportes y la reemplaza por un subsidio a la vejez, se resolvió rápidamente. El Senado descartó la eliminación de la moratoria, y será la Cámara de Diputados quien definirá este punto.

Finalmente, el Título 9, que aborda los impuestos al tabaco, no sufrió modificaciones en el Senado y quedó tal como fue aprobado en la Cámara baja, con 33 votos a favor, 10 en contra y 27 abstenciones. Este artículo establece un aumento del impuesto del 70% al 73%, eliminando el impuesto mínimo.

Ahora, la Ley Bases pasa a la Cámara de Diputados, donde se decidirá si se ratifican las modificaciones del Senado o se mantiene la versión original, en cuyo caso, los cambios introducidos en la Cámara alta serían deshechos. Esta histórica aprobación en el Senado representa una victoria significativa para el gobierno de Javier Milei y un punto crucial en la agenda legislativa de su administración.