"Se van a reabrir 70 años de historia, no sólo de Azul sino de toda la región"
La pelea por la dignidad parece comenzar a rendir sus frutos. El no tirar la toalla, el evitar que la fábrica bese por fin la lona y se escuche la desoladora cuenta que antecede al knock-out, empieza a ubicar a un grupo de azuleños en el peldaño más alto del podio de las luchas obreras del ámbito local.
Todo indicaría que el tren de la angustia, la desazón y la incertidumbre que partió apenas unos días antes del Año Nuevo de 2018 ahora cambió de vía y la esperanza de la reapertura parece ser la próxima estación en el camino.
"Esperanzados pero con los pies sobre la tierra"
Gustavo Luján fue uno de los fabriqueros que nunca bajó los brazos en esta historia que mantiene expectantes a los empleados de Fanazul, quienes se quedaron sin empleo el 28 de diciembre de 2017 y que a partir de ese mismo instante se cargaron al hombro la lucha de la dignidad que genera el trabajo. "Estamos contentos y esperanzados, pero con los pies sobre la tierra, porque la fábrica aún sigue siendo improductiva", advirtió el trabajador.
Un 10% encontró Trabajo formal, "el resto vive de changas"
Fueron muchos los malos momentos que debieron atravesar los fabriqueros de la planta local de Fabricaciones Militares durante estos dos años y medio de lucha. "La gran mayoría de los más de 200 trabajadores que quedamos afuera no pudo nunca conseguir un empleo formal, en blanco, cerca de un 10 por ciento y el resto vive de changas", comentó.
"Si no cambiaba el gobierno no estaríamos próximos a la reactivación"
En el transcurso de la charla, Luján manifestó que en los albores de esta historia "pensábamos que se podía dar marcha atrás con el cierre; sobre todo cuando nos reuníamos con quien era vicepresidenta de la Nación, Gabriela Michetti, pero después nos dimos cuenta que le estaban tomando el pelo hasta el mismísimo obispo Hugo Manuel Salaberry".
De todas formas, el trabajador manifestó que, a pesar de las piedras que iban cruzándose en el andar de los despedidos de Fanazul, "decidimos seguir adelante y allá por junio-julio del año pasado reactivamos la esperanza, ya que empezamos a ver que era posible un cambio de gobierno porque si no cambiaba el gobierno -seamos honestos- no estaríamos próximos a la reactivación".
"Ahí recargamos las pilas y a comienzos de agosto de 2019 arrancamos con todo de nuevo. Después de las PASO el panorama fue incluso más optimista y ya con el triunfo del Frente de Todos -si bien siempre tuvimos presente que no debíamos aflojar en la pelea- la luz de esperanza fue más grande", indicó también.
Además, Luján rememoró que "Agustín Rossi cuando estuvo en Azul nos dijo que si volvían a ser gobierno iban a reactivar la fábrica. Nosotros nos agarramos mucho de esas palabras".
Un ícono de la lucha
Uno de los símbolos de la lucha fabriquera es el acampe ubicado en el veredón Municipal, donde los trabajadores de Fanazul plantaron su estandarte para la "batalla". "En ese lugar pasamos de todo. Momentos muy fuertes. El primer Año Nuevo que pasamos ahí fue muy duro. Después te vas acostumbrando, pero nunca dejó de ser extremadamente difícil", explicó.
Ahora el panorama es diferente, ya que desde comienzos de este año algunas luces comenzaron a asomar entre tanta sombra.
"Ya desde enero comenzamos a reunirnos con Daniela Castro, secretaria de Ciencia, Tecnología e Industria para la Defensa, en razón de que aún no habían nombrado en ese momento al triunvirato que iba a conducir la Sociedad del Estado. Después eligieron a los directores Iván Durigón, Demián Tupac Panigo y Enrique Vizzo", mencionó.
"Espinoza se merecía ser parte de la reactivación"
Si bien la declaración del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio puso un freno a las gestiones de los fabriqueros, "en medio de la pandemia se acercó nuevamente Daniela Castro y nos dijo que iban a elegir un Director de Fábrica".
Esa responsabilidad recayó en el ingeniero Oscar Espinoza, sobre quien Luján dijo: "Personalmente, tengo la mejor opinión de él. Es un hombre que siempre estuvo en la fábrica y la conoce a fondo. Fue una mala circunstancia que justo él fuese el Director al momento del cierre. Él se merecía ser parte de la reactivación".
"Se van a reabrir 70 años de historia"
En otro tramo de la entrevista, el trabajador de Fanazul hizo hincapié en que "no es un tema menor que se van a reabrir 70 años de historia, no sólo de Azul sino de toda la región".
Vale recordar que cuando se cerró la planta, significó una pérdida de alrededor de 6 millones de pesos en circulación y consumo para la ciudad, de manera mensual.
En ese contexto, Lujan expresó que "la Provincia, de la mano del gobernador Axel Kicillof, debería hacerse eco de la trascendencia que tiene la reactivación de esta fábrica en la provincia que él conduce".
También remarcó que "el objetivo es que se reincorpore a todos los trabajadores que deseen volver. Hay chicos que por ahí tienen otro trabajo en el que quizás se hayan afianzado y quieran mantenerse ahí".
"Nosotros aún seguimos sin trabajo y la planta sigue sin reactivarse"
Finalmente, Luján subrayó que "esta lucha es un ejemplo de que no bajar los brazos tiene su premio. Conversando con quienes más anduvimos en este último tramo no deja de ser un logro personal haber mantenido la esperanza y haber creído que esto era posible".
"De todas formas hay que aclarar que todavía la fábrica está improductiva. Tenemos un Director, que es un paso importantísima, pero nosotros aún seguimos sin trabajo y la planta sigue sin reactivarse. Además, tenemos un muy buen diálogo con Fabricaciones y con el Ministerio de Defensa, pero nosotros todavía estamos afuera. Eso no hay que perderlo de vista", concluyó. (Diario El Tiempo)