La Apoaa y todos sus representantes trabajan para disminuir el número de animales abandonados en Olavarría, cumpliendo más de una década de actividad. La tarea desplegada en estos años fue mucha, siempre con la intención de ayudar a los perros que necesitan, sobre todo aquellos que están sin un hogar donde pasar sus días. Durante 10 años, el grupo trabajó en conjunto con las diferentes gestiones municipales.

Sin embargo, la situación actual no es la mejor. Apoaa no puede hacerse cargo de todos los perros que están abandonados, y la ausencia de una política "continua" y "masiva" produjo que la reducción de perros en condición de calle sea una tarea imposible. Así lo entienden representantes de la Asociación Protectora Olavarriense del Animal Abandonado, quienes señalaron que en la actualidad hay una mayor presencia de perros en situación de abandono.

Campañas de castraciones se realizaron en el último año, pero de forma "intermitente". Y al mismo tiempo, desde Apoaa señalaron una falta de educación en cuanto a los cuidados del animal, "la tenencia responsable", lo cual podría ayudar en conjunto con campañas intensivas al respecto.

Juliana Osinaga, integrante de la Asociación Protectora Olavarriense del Animal Abandonado, brindó detalles de la situación actual. Al mismo tiempo explicó que dar números precisos de perros abandonados es complejo, pero admitió que la presencia de los mismos es mayor a tiempos pasados. "Nosotros manejamos una población de 150 y 180 perros en el predio, pero el número exacto en situación de abandono no lo tenemos", confesó.

"Hay un mayor número de animales abandonados y está asociado a la situación económica actual. Además no se mantuvo el número de castraciones, es decir, su cantidad diaria no fue siempre la misma", comentó Juliana Osinaga en cuanto al contexto de perros en situación de calle.

Motivos

"Si bien siempre se castró en Olavarría, si no se hace de forma contínua y masiva, hay sectores que quedan afuera. Por ejemplo, acá tenes lugares de campo, donde no castran los perros y luego abandonan los cachorros en caminos aledaños", comentó Juliana Osinaga.

Entonces, para la integrante de Apoaa, se trata de un trabajo "complejo" el que hay que realizar. "Se necesita de un quirófano que esté en la mayor cantidad de lugares posibles, llevando a cabo una política masiva y continúa", afirmó. "No sólo de castración sino también de educación como cualquier política de salud; se puede tener las herramientas a disposición, pero si no hay conciencia no se logra nada", reclamó.

Lo que dejó en claro la licenciada es que "la realidad social y económica influyó lamentablemente en la cuestión de animales abandonados", por lo que se necesita de un trabajo masivo. "Hay una alta cantidad de perros en la calle, incluso perros de raza donde una piensa que el dueño aparecerá de un momento a otro pero que finalmente no sucede", afirmó.

Y con situación social y económica, una de las fundadoras de la Asociación Protectora Olavarriense del Animal Abandonado se refirió a "dificultades que pueden surgir para mantener un perro con un plan sanitario y atención veterinaria, ya que hay gente que no dispone del dinero para afrontar todo ésto, generando perros abandonados". Se trata, entonces, de una "cadena".

Desde Apoaa

"Estamos trabajando desde la institución en conjunto con el Municipio, del cual siempre hemos tenido apoyo. En el presente estamos con algunas obras en el predio y mejoras", comentó Juliana Osinaga en relación a la labor de la Asociación Protectora Olavarriense del Animal Abandonado. "Desde los proteccionistas seguimos insistiendo por más castraciones con un quirófano móvil", destacó.

En este sentido, Juliana Osinaga confesó que "las castraciones en Bromatología siempre se hicieron, tanto en la gestión de José Eseverri como en la de Ezequiel Galli, pero no siempre se llevaron a cabo en el mismo número, lo que produjo que al tiempo se vean los cachorros". "Donde no se controló durante un año con plenitud, quedaron perros sin castrarse y la multiplicación de cachorros es enorme y lógica, al mismo tiempo", explicó.

A su vez, la integrante de la Apoaa insistió y criticó que "no hubo programas masivos de educación, sino que son cosas que se hicieron de a momentos, de forma aislada", lo que condujo a "instituciones colapsadas y atravesadas por una realidad que las supera".

En el cierre, una de las fundadoras de la Asociación Protectora Olavarriense del Animal Abandonado dejó en claro que "gracias a Dios en Olavarría hay muchos proteccionistas, personas que de forma independiente o agrupadas le ponen el cuerpo y dinero a la situación". "Más allá de Apoaa, que es el referente, hay gente que continuamente hace un trabajo silencioso, visitando barrios para buscar perros, haciendo traslados de castraciones y buscando lugares", finalizó Juliana Osinaga.

El quirófano móvil de Bromatología. "Trabajo a largo plazo"

Hace dos semanas, el titular del área de Bromatología, Andrés Castro, se refirió a la puesta en marcha del quirófano veterinario móvil. "Esto es a largo plazo, no de un día para el otro; lo importante es que pudimos comenzar", había señalado en aquel momento.

El quirófano móvil comenzó a trabajar en los barrios Cuarteles y Matadero, con el objetivo de controlar la sobrepoblación animal, una problemática que existe desde hace mucho pero que se agravó en el último tiempo, y que quedó expuesta este año con lo sucedido en la cava ubicada detrás de la Virgen de Loma donde se encontró una veintena de perros. Desde entonces, distintas proteccionistas pidieron por castraciones masivas y gratuitas, un reclamo que llegó incluso al HCD.

Lo cierto es que después de largos meses de estar parado, el quirófano móvil se puso en marcha en los barrios dichos anteriormente. "No podemos castrar más porque para llegar a más se necesitaría no solo más personal, sino también un quirófano móvil más amplio", había dicho Castro, afirmando que el número de castraciones -600 mensuales- no era el ideal.

Ante este panorama, la tarea "no es sacar a los animales que están. Eso ya lo hemos hecho, sacamos perros de La Terminal o del centro pero a los dos días aparecen nuevos perros. Lo que buscamos es que no haya nuevas generaciones", había confirmado.