"Nada que ver con el norte de Buenos Aires (donde las fuertes lluvias ocasionaron inundaciones), nosotros estamos ajenos a esa situación. Tengo 15 días de pronóstico pero no da lluvia intensa. Pero volvemos a repetir: que la gente tenga conciencia de lo que puede llegar a pasar y que nos dejen entrar a los domiciliarios cuando estamos inspeccionando", solicitó el funcionario, que se ha encontrado con actitudes reacias a la hora de tocar timbre y solicitar una revisión intradomiciliaria.

El Ministerio de Salud ha reiterado a través de su página web las recomendaciones para evitar la proliferación de mosquitos, para lo cual es indispensable "eliminar de las viviendas y sus alrededores los recipientes que puedan contener agua, cortar el césped con frecuencia". El ministro de Salud, Juan Manzur, recomienda además "retirar de los jardines objetos sin utilidad como latas, botellas, neumáticos, trozos de plástico, lona, bidones cortados para que el agua no se acumule".

Que dejen entrar

El dengue es una enfermedad viral transmitida por la picadura del mosquito Aedes aegypti. Cuando el mosquito se alimenta con sangre de una persona enferma de dengue y luego pica a otras personas les transmite esta enfermedad. El contagio sólo se produce por la picadura de los mosquitos infectados, nunca de una persona a otra, ni a través de objetos o de la leche materna.

En Olavarría intensificaron los controles y los operativos de fumigación luego de haber detectado larvas de Aedes aegypti en tres viviendas de la ciudad, a mediados de enero, dado que las altas temperaturas y las posibles favorecen la aparición del insecto. Hace tres semanas el monitoreo se realizó en la zona comprendida por avenida Pringles, 9 de Julio y 25 de Mayo, entre las avenidas Colón y Del Valle. Para que las inspecciones fueran más efectivas se solicitó la colaboración de los vecinos, en el caso de que fuera necesario fumigar.

"La ventaja es que no ha llovido nada acá. El alerta es en la provincia, humedad y temperatura. Acá cayeron 8 ó 10 milímetros y no hay agua en ningún recipiente. Solo tenemos como referencia las larvitrampas y nos dio negativo pero a partir del positivo anterior, repasamos la fumigación en la zona del ferrocarril y del lado del centro, fuimos calle por calle hasta la 25 de Mayo pero hicimos 70 casas de las 500 que hay todas las manzanas", explicó Larroudé.

Es que no todos les abren paso a los inspectores. En la zona céntrica "la gente es más reacia. Nos pasó lo mismo en el barrio Luján, al principio, donde insistimos mucho hasta que nos conocieron", indicó.

"Como sabíamos que estaba el mosquito adulto en la zona del ferrocarril, como prevención hicimos fumigaciones intradomiciliarias y en intemperie, luego de observar y explicar la situación. Si había riesgo, fumigábamos con el cañón de humo pero la zona está bastante bien. La prevención que hay que hacer es la domiciliaria", remarcó el funcionario, refiriéndose a la conducta individual, más allá de la actuación de Inspección Sanitaria y Bromatología.

¿Qué productos aplican para combatir la presencia del Aedes aegypti? "Aplicamos un insecticida común pero hay otros que tienen poder residual. Este en el momento, mata los que encuentra mediante una aspersión más fina que el Raid y los habitantes deben retirarse un rato cuando lo aplicamos", planteó Federico Larroudé.

Pero hay situaciones en las que los propietarios "dicen que controlan ellos, entonces les explicamos dónde pueden encontrar el mosquito y dónde deben echar más insecticida". De todos modos, el funcionario aclaró que en el microcentro es "raro encontrar cacharros. En casi todas las manzanas hay construcciones y es raro encontrar un baldío. Puede haber pastizales pero no encontramos nada".

En el barrio Luján, donde había más riesgo, "teníamos más cantidad de terrenos baldíos, más gente que tiene talleres y donde se acumula más cacharros" que sirven como reservorios del mosquito.

Ahora, con respecto al convenio con Ferrosur, para fumigar los camiones que llegan del Chaco con durmientes, el funcionario señaló que "aún no han ingresado camiones pero vamos a insistir porque tienen que cumplir con un protocolo para el ingreso. Y si es un riesgo, porque son durmientes que vienen de lugares donde hay dengue y pueden tener agujeritos donde alojar larvas o mosquitos, vamos a controlarlos y ver si es necesario fumigarlos".

Mientras tanto, "la idea es que la gente siga colaborando en prevención y descacharrado. Larvas no encontramos desde mediados de enero, que apareció en el predio de ferrocarril, en Infraestructura, por la avenida Pringles" y ahora "seguimos con muestreos de rutina". "A la gente le pedimos que tenga conciencia de lo que puede llegar a pasar y que nos dejen entrar", pidió Larroudé.

En los sitios donde sí encontraron larvas, los vecinos son más accesibles. "En Loma Negra hay predisposición pero hay que insistir, nos tienen que ver, escucharnos... No está como hábito y en barrio Luján, al principio eran más rígidos con el tema pero ahora no, escuchan y han limpiado y ordenado bastante aunque siempre hay alguno que descarrila pero en general la gente bien en los lugares a los que estamos yendo".