Será a las 11 en Rivadavia y Belgrano, y desde allí irán a la Municipalidad donde harán una entrega simbólica de las llaves de los 25 salones que todavía siguen en pie.

"Eventos sin baile no son eventos", será la consigna que guiará la manifestación que tiene que objetivo lograr la autorización del baile con protocolos.

"No queremos que multen ni clausuren, buscamos simplemente igualdad de condiciones para trabajar porque hoy se hacen cumpleaños de 15 y casamientos en lugares no habilitados como campos y quintas, hay clubes que incluso publicitan en redes sociales que tienen resto-bar bailable y promocionan las bandas en vivo que se presentarán o cervecerías que suben videos a Instagram con gente bailando", explicó Mónica Hernando, la reconocida organizadora de eventos que tomó la voz oficial de la Agrupación desde los primeros meses del 2020.

Los salones de eventos trabajan actualmente con la mitad de la capacidad del salón y con un permitido de hasta 100 personas, una modalidad que continúa perjudicando a uno de los sectores más afectados por la pandemia.

"Podemos cumplir mucho más con todos los protocolos que se nos exijan. Hay salones con mucha capacidad", expuso Mónica Hernando enumerando por ejemplo La Rural, con un salón para 260 o 270 personas y que ahora reduce la capacidad a no más de 100.

"Lo que nos parece absurdo es que no habiliten una fiesta de 15 con baile pero sí el UPD (Ultimo Primer Día). Sabemos que los eventos son parte importantísima de la vida social, incluso hace bien a la salud mental después de tanto encierro".

Algunas de las propuestas busca que aunque sea se pueda bailar alrededor de cada mesa, solo aquellas personas que comparten ese lugar, que en vez de habilitar espacios para un máximo de 100 personas se habilite para 80 o que se acorte el horario de cierre, "estamos dispuestos a conversar sobre las condiciones, pero los eventos necesitan tener su baile".

En este contexto, Hernando contó que "nos estamos perdiendo las fiestas de 16 años de chicas que habían contratado el evento el año pasado para sus 15 porque te preguntan si pueden bailar o si pueden tomar alcohol. Entonces ante la negativa, directamente te dicen que no y que para eso lo festejan en otro lado. Es muy injusto".

Las condiciones actuales en las que pueden trabajar los organizadores de eventos "las tendríamos que haber logrado en octubre o en noviembre y no en febrero porque nos perdimos también las fiestas empresariales", explicó.

Y mencionó además el agravante de que "las habilitaciones de los salones de fiestas duran un año y ahora muchos contrajeron deudas entonces para habilitarlos nuevamente tienen que pagar sumas de 35 mil pesos o más después de no tener ingresos durante todo un año".

En este contexto, Mónica Hernando sostuvo que "lo que va a suceder es que terminen cerrando todos los salones de Olavarría con todo lo que ello implica porque detrás de un evento hay muchísima gente trabajando".