Con organización y trabajo finalizamos la primera etapa de asistencia territorial a 100 familias de la economía popular que forzosamente tuvieron que parar sus actividades laborales en el marco del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio.

En estos casos donde la emergencia apremia es necesario aunar rápidamente recursos humanos y económicos que, canalizados a través de las organizaciones y movimientos sociales con trabajo territorial previo, garantizan mayor llegada y eficacia a la hora de atender las urgencias de nuestro pueblo.

Con la iniciativa del MTE en conjunto con Cáritas Monte Viggiano, Corazones de Barro, Red Solidaria, Capilla San Cayetano, Federación de Sociedades de Fomento y Juntas Vecinales, Soldados Sontinentales, Tierra Techo y Trabajo, y la Cooperativa Viento en Contra, se realizó el armado de las bolsas de alimentos secos y productos de huerta comprados a quinteros locales, que cotidianamente trabajan la herramienta Pueblo a pueblo del MTE Rural.

El reparto a domicilio estuvo a cargo de los compañeros cartoneros de la Cooperativa Viento en Contra y Corazones de Barro demostrando el compromiso, la solidaridad y la empatía con el pueblo que hoy se encuentra atravesando una grave crisis económica.

Esta actividad se pudo llevar a cabo a partir de las conquistas previas de los movimientos populares, que hoy garantizan recursos indispensables para sostener la crisis que nos dejó el neoliberalismo y que hoy golpea con más fuerza debido al COVID-19.

También queremos agradecer al Centro de Ingenieros de Olavarría y a todos aquellos vecinos que hicieron su aporte económico para llevar a cabo la propuesta.

Seguiremos trabajando para garantizar el bienestar de los trabajadores que aún no han alcanzado las conquistas de los derechos que les corresponden.

Por un mundo sin esclavos ni excluidos.