La dirección de Desarrollo Sustentable de la secretaría de Desarrollo Económico, de la Municipalidad de Olavarría, se ha sumado este año nuevamente a la campaña global Julio sin plásticos, y durante todo el mes desde sus redes sociales han compartido varias imágenes que presentan algunas alternativas de artículos de uso diario pero sin envases. Marina Teuly, parte del equipo de la dirección de Desarrollo Sustentable, indicó que decidieron adherirse a esta iniciativa para promover este mes y que más personas se sumen a la campaña. "Aprovechamos la celebración para compartir todas las semanas un sector de la casa en el que podemos reemplazar plásticos de un solo uso y cuáles son las opciones que tenemos", señaló.

Julio sin plástico, es una iniciativa que se creó en 2011 en Australia y desde entonces se ha replicado a nivel mundial. La importancia de reducir el uso de este material radica en que el 42% del plástico utilizado en el mundo se destina al empaquetado de alimentos y productos manufacturados, es decir, plásticos de un solo uso que apenas pasan unos minutos en las manos de los consumidores. Además de que más del 90% de los plásticos del mundo se producen a partir de combustibles fósiles, un recurso natural no renovable.

Es sabido que evitar el uso de este material resulta sumamente difícil debido a que se encuentra prácticamente en todos los productos que consumimos cotidianamente. Según datos publicados por National Geographic, cada año 8 millones de toneladas de residuos plásticos acaban en los océanos. En el caso de las botellas, se remarca el hecho de que tardan unos 450 años en descomponerse, que pueden llegar a ser 1.000 si éstas no se encuentran a la intemperie.

Por esta razón desde la dirección de Desarrollo Sustentable se promueve el uso y consumo de distintos artículos para el hogar libres de envases. Actualmente existen muchos productos ecológicos que cada vez son más conocidos y utilizados en todo el mundo, como los cepillos de dientes de bambú, el shampoo sólido, las esponjas vegetales y la copa menstrual. Sin embargo también es posible reducir el plástico en la cocina, utilizando servilletas de tela, sorbetes metálicos y llevando siempre bolsas de tela para realizar las compras.

"Entendemos que es difícil y por eso presentamos alternativas, para que se vaya incorporando ese hábito de ser un consumidor o consumidora responsable, y de ser más consciente a la hora de elegir un producto, ver el tipo de packaging que tiene, que opciones tengo para poder reemplazar y así evitar tanto consumo de plástico", expresó Teuly. Además destacó que localmente hay muchas opciones para acceder a este tipo de productos, por lo que también resaltó la importancia de promuever la compra local.

Cabe destacar que este área también se encarga del programa GIRO de gestión integral de residuos, impulsado por el Municipio y la Fundación Mckinsey.org. Este programa se encuentra en funcionamiento en la ciudad desde el 2 de marzo con el objetivo de reducir la cantidad de residuos que terminan en el relleno sanitario e incorporarlos nuevamente al ciclo productivo, así como también realizar campañas de concientización para la comunidad que ayuden a aumentar la cantidad de separación tanto de los materiales reciclables como de los residuos compostables.

Marina Teuly remarcó que con este tipo de iniciativas se busca concientizar y dar a conocer las opciones que existen actualmente para reemplazar los plásticos de un solo uso. "Entendemos que no es fácil, por eso proponemos que lo hagan de a poco y quizás en un mes intenten cambiar una cosa por semana por ejemplo, y al final del mes van a ver que ya tienen cierto cambio de hábito hecho, que es el objetivo", puntualizó.

El reciclaje no alcanza

Desde Greenpeace se informó a este medio, que según varios estudios, los plásticos son una fuente no reconocida de gases de efecto invernadero relevantes para el clima y se prevé que aumente por la producción y acumulación de más plásticos en el medio ambiente.

Leonel Mingo, coordinador de campaña de Greenpeace, informó que el porcentaje de reciclado en argentina es bajo, y que el principal motivo por el cual se recicla poco es que el plástico es en su enorme mayoría no reciclable. Además explicó que existen 7 tipos de plásticos en el mundo, y que sólo es reciclable el PET, que es el Tereftalato de polietileno y corresponde a la categoría 1.

El activista señaló que el resto de los plásticos prácticamente no se reciclan porque "es más costoso su reciclado que su elaboración de cero". Agregó que esto se debe a la inexistencia de una ley de Responsabilidad Extendida del Productor, un proyecto que desde Greenpeace están impulsando desde hace años, que implica que todo productor y/o importador se haga responsable de los residuos que genera.

Sin embargo, Mingo explicó que si existiese una legislación que obligue a las empresas a reciclar todo el plástico que largan al mercado, "así y todo hay muchas categorías que no son reciclables, por eso más allá de que el reciclaje es importante, hoy en el año 2021 lo que tenemos que entender es que el reciclaje en sí no alcanza, lo que hay que hacer dejar de una vez por todas de usar los plásticos", determinó.