Favorecida por el clima, ayer comenzó a desarrollarse la campaña de fumigación contra la plaga de tucuras sobre unas 80.000 hectáreas, es decir una traza equivalente al 15 por ciento de la superficie total del Partido de Olavarría. En esta ocasión, se demarcaron 5 polígonos que serán pulverizados mediante 5 aviones y la duración estimada de los trabajos es de 15 a 20 días, con una inversión superior a los 40 millones de pesos.

Los trabajos de prospección para determinar la mayor densidad de desoves del voraz insecto empezaron a desarrollarse durante el mes de julio con el beneficio de la escasez de lluvias, que permitieron detectar los desoves con mayor precisión ante la falta de humedad.

El ingeniero agrónomo Gerardo Di Pino, que integra el equipo de trabajo de la Dirección de Actividades Agropecuarias, brindó ayer algunas precisiones acerca del tenor de los trabajos encarados en la presente campaña y confirmó que las tareas comenzaron "hoy (por ayer) desde 2 pistas: una que está ubicada en la estancia La Cautiva, cerca de Espigas, y la otra es la pista de San Antonio, en la zona de Mapis", señaló.

Con el objetivo de finalizar los trabajos sin mayores demoras, por estos días "se están realizando en simultáneo aplicaciones en el polígono I, el II y el V". Luego de las prospecciones, "en total habíamos delimitado 80.000 hectáreas perimetrales que tenemos pensado terminar en 15 o 20 días".

En la actualidad, "están operando 5 aviones, de los cuales tenemos repartidos los dos aviones más grandes, que son aviones turbo, están trabajando en la pista San Antonio". En tanto, "los 3 aviones restantes están en la pista de La Cautiva", reveló Di Pino.

El funcionario especificó que las tareas, como es habitual, se ciñen al "plan de trabajo que viene realizando la Comisión de Lucha en todos los campos del Distrito. Nosotros desde el mes de julio en adelante comenzamos con las tareas de monitoreo de desoves, lo cual nos permite anticipar algún problema".

Con anticipación al desarrollo de los insectos, desde mediados de año "se empieza a trabajar sobre la descendencia que dejó la tucura el año pasado, eso nos da un alerta de prevención para poder encarar y organizar la campaña de este año".

El ingeniero agrónomo manifestó que a diferencia de otras campañas, "puntualmente, este año viene seco -es más, algunos cuarteles de la zona de Mapis, el IV, XVIII y XIX, tienen el pedido de emergencia por sequía- y eso hace adelantar los ciclos de la tucura. Pero lo bueno del clima es que la primavera empezó tarde este año y hubo algunos días fríos hasta mediados de noviembre", estableció.

Esa circunstancia "hizo que en general las tucuras nacieran más tarde y se mantuvo en los estadíos más juveniles más tarde, pero ya en diciembre los cuarteles más complicados son donde estamos aplicando porque hay una mayor densidad".

Para tratar de determinar el comportamiento de la plaga y la efectividad de las fumigaciones, "lo que hicimos este año fue superponer las últimas 3 campañas de aplicación". En ese sentido, "respecto de los polígonos elegidos este año frente a los del año pasado, la superposición es cero porque donde se aplicó el año pasado la densidad (de nacimientos) es muy baja. Recién encontramos alguna superposición con la campaña de 2015/16", aseguró.

De esa forma, destacó que la tucura "es un insecto que se va desplazando en busca de alimento y puede volar de 20 a 30 kilómetros en todo su ciclo; es por eso que la plaga es móvil y se puede trasladar".

Para combatir a la perjudicial plaga "la empresa que ganó la licitación es Aviación Agrícola Argentina, además se contrataron aviones de una empresa de Daireaux y de otra de Chacabuco. Se firmó un contrato de 30 días pero eso va a depender de las condiciones climáticas; si nos acompaña el clima creemos que en 15 o 20 días estaríamos terminando". Para concretar los trabajos, "la inversión en esta campaña es cercana a los 41 millones de pesos".

Asimismo, Di Pino remarcó que a la par se trabaja en un plan experimental diseñado en el ámbito provincial. "Estamos en línea directa con la Provincia, puntualmente tenemos muy buen contacto con Hugo Herrera, que es director de Fiscalización".

Específicamente se trabaja con un agente biológico para abandonar gradualmente la fumigación con productos químicos. "Este año había muestras del paranoceno para aplicar en 300 hectáreas y se eligió a Laprida, Olavarría y Tandil como lugares de experimentación".

Desde la Dirección de Actividades Agropecuarias "elegimos la zona de Pourtalé, donde se delimitó un polígono de 100 hectáreas y se aplicó con avión con el paranocema en pastillas de trigo para que la tucura lo pueda consumir, queda parasitada y ese hongo se transmite a su descendencia; la deja débil, aletargada y consume menos", sentenció Di Pino.