Daniel Lovano - dlovano@elpopular.com.ar

Cuando la confianza sucumbe ante la tentación de dejarse mezclar en el cenagoso terreno de la subestimación, las consecuencias pueden ser muy peligrosas. Si se trata de la cuestión sanitaria, hasta podrían ser irreversibles.  

Eso parece estar sucediendo con una porción importante de la población argentina que viene desestimando las recomendaciones de aplicarse uno y hasta dos refuerzos (según el segmento al que pertenezca) de la vacuna contra la COVID-19. 

"El coronavirus ya pasó" es uno de los argumentos escuchados entre los que se niegan. 

"Ya me di las dos vacunas y listo; no me pienso seguir vacunando" también se escucha, inclusive en gente que pertenece a grupos de riesgo por tener ciertas comorbilidades. 

En la cara opuesta el diagnóstico de los que saben es que, si bien la vacunación atenuó los efectos de esta zoonosis presumiblemente surgida de China, la pandemia aún no concluyó y los cuidados siempre deben estar presente.  De allí que las autoridades sanitarias hoy están preocupadas con las estadísticas, y no son necesariamente las vinculadas con los contagios ni con los últimos decesos. 

Aunque el 80% de la población completó a nivel nacional el esquema primario de vacunación, sólo 40,7% se dio la primera dosis de refuerzo

Según un informe conocido en las últimas horas, que reproduce la agencia de noticias Télam, aunque el 80% de la población completó a nivel nacional el esquema primario de vacunación, sólo 40,7% se dio la primera dosis de refuerzo (o la tercera vacuna), un instrumento decisivo para fortalecer los anticuerpos en esta cuarta ola de coronavirus que atraviesa el país. 

De acuerdo con esos datos que maneja el Ministerio de Salud de la Nación, el 89,7% de las personas residentes en la Argentina inició su esquema de vacunación.  Por rango etario, en la población mayor de 50 años (que tiene el 90% de las muertes por COVID) el 96,4% inició su esquema, el 94,2% lo completó y solo 67,2% aplicó su primera dosis de refuerzo.  En adolescentes, a nivel país la cobertura con esquema primario es importante, ya que el 92,4% inició su esquema y el 80,2% lo completó, pero apenas 29,2% se aplicó el refuerzo (o tercera dosis). 

Las autoridades sanitarias de la Argentina comenzaron a aplicar el segundo refuerzo desde el 14 de abril, cuando el Consejo Federal de Salud (Cofesa) enfocó en una primera etapa al personal de salud, las personas mayores de 50 años y las mayores de 12 años inmunocomprometidos que habían recibido el primer refuerzo (o tercera dosis) con un mínimo de cuatro meses de antelación. 

Tenemos un poco más de 113 mil olavarrienses vacunados con primeras dosis, y tenemos 67 mil ya con el primer refuerzo

El diagnóstico es aplicable a Olavarría, ¿pero en qué grado? "Nosotros estamos algunos puntos por encima de los registros nacionales. Tenemos un poco más de 113 mil olavarrienses vacunados con primeras dosis, y tenemos 67 mil ya con el primer refuerzo, lo que sería la tercera dosis. Representa cerca del 60%, y a eso añadimos unos 7.000 que tienen el segundo refuerzo" informó ayer el licenciado Ramiro Borzi, director de la Región Sanitaria IX

Con tales números en la mano, exhortó a "seguir difundiendo la importancia de la vacunación. Dentro del universo de gente que se podían dar el primer refuerzo hay personas que no se lo han aplicado y aún están a tiempo de hacerlo". 

Las vacunas están, tenemos stock, por lo cual con lo que se viene -el frío, el invierno- es muy importante que la gente esté inmunizada

"Las vacunas están, tenemos stock, por lo cual con lo que se viene -el frío, el invierno- es muy importante que la gente esté inmunizada. Sabemos que va a subir la curva de contagios en toda la región, entonces prevengamos cuidándonos" sugirió. 

Sobre la negativa en algunos sectores de la población a seguir las recomendaciones de las autoridades sanitarias, Borzi opinó que "los que actúan de este modo sin dudas que están subestimando la situación". 

"En estas últimas dos o tres semanas, que la curva empieza a subir y vuelve a ser noticia una situación epidemiológica al alza en COVID, vemos que hay una reacción. Eso hace que estemos vacunando mucho más que 20 días atrás" destacó.  Subrayó que esto no responde a "sensaciones o impulsos sino a una conciencia colectiva e, insisto, hay aprovechar que los recursos están, porque para atravesar un buen estadio invernal tenemos que seguir cuidándonos". 

Borzi analizó también el grado actual de agresividad que muestra la pandemia: "Está claro que, con la vacunación, el impacto en cuanto a casos graves tuvo una considerable disminución".

"Es muy menor la ocupación hospitalaria por pacientes COVID, entonces en ese sentido el impacto obviamente cambió, pero no hay que relajarse" dijo. 

También aportó su reflexión acerca de la conducta a seguir ante la similitud de los síntomas entre la COVID y la gripe estacional que aparece a esta altura del año.  "Hago mías las palabras del ministro de salud de la Provincia, el doctor Kreplak. Ahora debe primar la situación clínica, o sea que cuando aparezcan los síntomas hay que quedarse aislado, más allá del testeo o no. El aislamiento es necesario para cuidarse y para cuidar al resto" señaló. 

Borzi hizo una referencia específica a la situación de los más pequeños, de 5 a 11 años. "Desde el miércoles pasado comenzó el refuerzo libre para los chicos, lo que sería una tercera dosis, siempre que hayan pasado cuatro meses de aplicada la segunda. Esto es muy importante para ir avanzando en este sentido" marcó. 

"Está comprobado que el camino es ese, que para revertir la situación es tener la población vacunada" recalcó 

Sobre los números en la Ciudad entre los más chicos, con las estadísticas que obran en su poder el licenciado Borzi reportó entre los menores de 12 años 11.670 chicos con las primeras dosis y 9.397 con segundas dosis. No hay registros aún de refuerzos aplicados. 

Como última recomendación, expresó: "No voy a ponerle yo el título a la nota, pero por favor que la gente no deje de vacunarse. Que no se confíe porque aún estamos en pandemia"