En Olavarría, 27.600 estudiantes se preparan hoy para la vuelta a clases, esta vez con presencialidad completa desde el comienzo del ciclo lectivo y bajo un sistema de "Aulas Seguras" donde el barbijo seguirá siendo parte de la escena escolar, al menos en territorio bonaerense. 

Del total, 19 mil concurrirán a instituciones estatales y 8.600 lo harán en escuelas de gestión privada; en los niveles Inicial, Primario y Secundario. 

Es el tercer año en pandemia y la escuela ha tenido que amoldarse a un contexto de incertidumbres y nuevas formas de enseñar y de aprender. Primero fue la virtualidad en 2020, y luego las burbujas y asistencia programada. Ahora, la vuelta a clases será con presencialidad completa y se hará con los cuidados que requiere la situación actual, ya con una vacunación importante consolidada que tiene a un gran porcentaje de la población con su esquema completo y de refuerzo.

Entre los principales puntos del nuevo protocolo de salud en las escuelas, en la Provincia se elimina el sistema de burbujas, se mantiene la presencialidad de los cursos aún ante un eventual caso positivo de un integrante del mismo, rige el tapabocas en los espacios cerrados a partir del primer grado y habrá postas de vacunación, aunque aún no es obligatorio que los chicos estén vacunados para ir al colegio.

 En este contexto, el regreso a clases será "con los cuidados necesarios como la higiene y la limpieza, y un aula que sigue siendo segura con la utilización de los barbijos, cuidando siempre al otro porque de eso se trata: de poder pensar que cuando yo me cuido estoy cuidando a los otros y a las otras", exponía a este Diario el Jefe Distrital de Educación Julio Benítez, cuando se oficializaba el protocolo nacional a fines del mes pasado.

Ya no se implementarán las burbujas de alumnos como el año pasado, pero sí se mantendrá el uso de barbijos. Habrá modificaciones en los tiempos de aislamiento y además los colegios recabarán la información sobre la vacunación de la comunidad educativa, tanto contra el coronavirus como de las otras dosis que integran el calendario nacional.

"Esta vuelta con presencialidad completa es un momento de celebración. No estamos hablando de post pandemia, pero sí ya no hablamos de burbujas ni de asistencia programada sino de la presencialidad completa, lo que implica a todos y todas en la escuela", resumía Benítez días antes de que comenzara a concretarse la campaña "Vacunate para ir a la Escuela", que en nuestra ciudad instaló postas de vacunación en las Primarias N° 51, 53, 80, 49 y 4 desde el 21 de febrero.

En todo territorio provincial, son más de 5 millones los niños y adolescentes que comenzarán el camino de retorno a la "nueva normalidad", luego de un 2021 de presencialidad con interrupciones en determinadas localidades en el marco de la segunda ola a principios de ese año y de un regreso "cara a cara" definitivo a partir de ocrtubre. 

En el medio de ese proceso hubo cambios de ministros: en Nación, asumió Jaime Perczyk y en Provincia, Agustina Vila fue reemplazada por Alberto Sileoni.

Los nuevos funcionarios buscaron variantes para volver a la presencialidad escolar. También el contexto epidemiológico es otro. El 92% del personal docente completó el esquema de inmunización, mientras 43% ya recibió dosis de refuerzo, según informó la ministra de Salud, Carla Vizzotti.

Lo más saliente

Entre los principales puntos del nuevo protocolo de salud en las escuelas, en la Provincia se elimina el sistema de burbujas, se mantiene la presencialidad de los cursos aún ante un eventual caso positivo de un integrante del mismo, rige el tapabocas en los espacios cerrados a partir del primer grado y habrá postas de vacunación, aunque aún no es obligatorio que los chicos estén vacunados para ir al colegio.

Entre sus rasgos más salientes, el nuevo protocolo que regirá en las aulas de la provincia de Buenos Aires incluye la suspensión del sistema de burbujas. Este esquema, que rigió parte del año escolar 2021, incluía que los miembros de un curso que compartieran aula con un contagiado de Covid-19 tuvieran que aislarse al confirmarse el diagnóstico. A partir de ahora, aunque el test de un compañero de curso resulte positivo, los demás deberán seguir asistiendo a las aulas.

Los barbijos seguirán siendo protagonistas dentro del aula, al menos en la jurisdicción más extensa de la Argentina. Mientras otros protocolos educativos como el de la Ciudad de Buenos Aires eliminaron esta medida hasta el cuarto grado, el plan "Aulas Seguras" contempla que seguirá siendo necesario usar tapabocas a partir de primer grado en todos los espacios cerrados.

En este sentido, uno de los rasgos distintivos en la provincia de Buenos Aires es el suministro de barbijos escolares, según anunció el ministro de Salud provincial, Nicolás Kreplak: "ahora con la vacuna no es indispensable que garanticemos la distancia, pero tenemos que garantizar el uso de barbijo de calidad. Desde primer grado con barbijo."

Además, el Ejecutivo Provincial proveerá medidores de dióxido de carbono para determinar la calidad del aire al interior de las aulas. De esta forma, se puede saber cuando el aire en un determinado espacio se encuentra "estancado".