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Defensor a ultranza de la interrupción de las clases presenciales como medida imprescindible para frenar la escalada de contagios del coronavirus, luego de un par de semanas de predicar en el desierto, de padecer el descrédito de una buena parte del arco mediático y del poder político de su provincia, el doctor Oscar Atienza es una de las palabras más solicitadas a partir del último DNU presidencial.

Según reza su perfil LinkedIn, el doctor Atienza es docente universitario en Medicina y Ciencias Económicas en la Universidad Nacional de Córdoba; doctor en Medicina y Cirugía; Magister en Administración de Servicios de salud; Magister en Salud Pública; docente de materias de postgrado en análisis estadístico y redacción científica, e investigador Categoría III Secyt.

"Es totalmente claro que la presencialidad afecta a la cantidad de casos" disparó.

"Si verificamos el tiempo en el que tiene impacto todo tipo de movilización, siempre lo esperamos en las dos semanas" declaró.

En lo particular, recordó que "claramente el 23 de marzo fue el día que se detonó todo, con 9400 casos, y si nos vamos más o menos unos 21 días para atrás (porque el período de incubación del virus es de 14 días +/- 7), fue la primera semana de marzo la que marcó el inicio de estas infecciones, y ese aumento se dio en todos los pueblos del interior del país".

"Esto no es un tema focalizado en el AMBA. Formosa tenía una situación controlada y ahora hay infecciones relacionadas con la escuela. Lo publicó Lancet en febrero: la escuela funciona en países que no han mitigado el peligro como un acelerador muy peligroso en la cantidad de contagios" precisó.

"Cuando uno analiza variables súper masivas lo que hay que buscar es básicamente el frío, que sabemos que afecta por igual a muchas poblaciones; la otra que se puede buscar es la cepa de Manaos, que empezó a circular pero hoy no llega a tener un 10% de prevalencia y hay que aguardar a mayo. Lo único que irrumpió en la Argentina en el mes de marzo fue la presencialidad" argumentó.

"Así que no hay mucho más que buscar; ahí está la causa de los contagios" certificó.

El doctor Atienza rebatió a los que hacen centro en la presencialidad, sin tener en cuenta todo lo que ella mueve: "Es responsable del 50% del movimiento de toda la población en cualquier ciudad, entre alumno, papá, mamá, hermanos, abuelos, kiosqueros, docentes, libreros, choferes, portero, administrativo… Hay muchísima gente metida".

"Por cada chico en el aula hay al menos una persona afuera, que está esperando en la puerta; los chicos tienen una dinámica de juntarse alrededor de las escuelas. Piensan ‘a mí no me va a pasar’. Uno los ve tomando gaseosas del pico de una sola botella, porque ellos a esto no lo ponen en una situación de gravedad; el adolescente no lo mide de este modo" describió.

En el mismo sentido, advirtió que "no tiene nada que ver el interior del aula en este asunto, por ahora... El contagio no se produce adentro; sí se va a producir en el invierno, cuando tengan que cerrar las ventanas, porque los chicos van a respirar el mismo aire más allá de que tengan barbijos" explicó.

Atienza rebatió también los argumentos de los pediatras que se oponen a la interrupción de las clases presenciales.

"El principal derecho de todo ser humano, incluidos niños, niñas y adolescentes, es el derecho a la vida y a la salud. A partir de allí uno puede disfrutar de los demás derechos, por ejemplo el derecho a la educación. Sin vida, sin salud no hay educación" enfatizó.

"Hay un orden de prioridades que los pediatras deben que empezar a invertir. De hecho, la Asociación Argentina de Pediatría, que estaba muy en contra de la virtualidad, el viernes elaboró un documento donde dice ‘ante el aumento de la cantidad de casos es necesario cerrar al menos por un tiempo y en modo focalizado’. Son claros en eso" reveló.

Atribuyó la postura de algunos pediatras "a posicionamientos políticos de ciertos grupos en el interior, pero yo los entiendo. Ellos no están formados para analizar dinámicas de pandemia, sino que están más entrenados para el tratamiento de la enfermedad. Es correcto lo que plantean. ¿Quién no quiere que los chicos estén es las escuelas? Todos queremos, no hay duda de ello, ahora que los chicos estén en la escuela en pandemia no".

"En la Argentina tenemos 250.000 chicos infectados. El grupo etario que más ha crecido proporcionalmente en cantidad de contagios los últimos días es el de los chicos de 0 a 18 años. Así pues tenemos los indicadores que nos hacen pensar que todo está relacionado con la escuela" reiteró.

"Este discurso de que la escuela es el mejor lugar termina confundiendo a la gente. Ya fue. Es una historia de hace 10 días, que no teníamos datos. Hoy hay que actualizarse, como hizo la Sociedad Argentina de Pediatría con el tuit del viernes, y dar la información como corresponde. Ahora, no comparto que deban ser en sectores localizados; creo que hay que cerrar todas las escuelas del país por 15 días" subrayó.

En función del último razonamiento, el doctor Atienza especuló que la medida del presidente Fernández puede no ser tan efectiva. "Hasta ahora no vi muchas provincias que adhirieran, entonces no va a servir absolutamente de nada" opinó.

Al médico cordobés le preocupa que los casos de la presencialidad se junten en mayo con una mayor incidencia de las cepas de Manaos y la británica, y con el frío.

"Si dejamos que esas tres variantes se junten, en los próximos 30 días vamos a estar en serios problemas. Pensemos que aumentó 7 veces la cantidad de casos en el último mes. Imaginemos el escenario si en mayo tenemos la escolaridad, el frío y la prevalencia de las nuevas cepas" alertó.

En un mensaje dirigido a negacionistas, sostuvo que "en el mundo ha sido así, ¿por qué no en la Argentina? Uruguay pasó en 15 días de ser un país modelo a ser el de mayor cantidad de casos por millón de habitantes en el mundo".

"A Portugal le pasó lo mismo, en septiembre abrió las escuelas y en diciembre era el país con mayor cantidad de casos de Europa. Italia tuvo que cerrar; Alemania está cerrada, Inglaterra debió cerrar por tres meses, Chile está cerrado y el 50% de los fallecidos el mes pasado no pudieron llegar a las terapias intensivas. Brasil está a un ritmo de 4.500 fallecidos diarios. ¿Por qué entonces el virus debería hacer una excepción con la Argentina?" se preguntó.

"No estamos atravesando la segunda ola. Estamos en una nueva pandemia dentro de la pandemia anterior" remarcó.

El doctor Atienza, que viene siendo muy crítico con la política sanitaria del gobernador Schiaretti en Córdoba, se refirió a su provincia: "El 15 de marzo teníamos 526 personas internadas en UTI, un mes después tenemos 1.000. Hemos tenido una triplicación en la cantidad de casos, y después de CABA está segunda a nivel nacional en cantidad de casos por cada 100 mil habitantes".

"Córdoba nunca frenó en nada, nunca tomó medidas, no hay controles. Incluso la semana pasada, después de las disposiciones del gobierno nacional, uno puede encontrar un bar abierto a las 12 de la noche. Adhieren a la medida, pero el Estado mira para el otro lado" objetó.

En la interrupción de la presencialidad en las escuelas, una vez más las vacas sagradas de la comunidad mediática argentina y políticos de la oposición salieron a cuestionar la medida.

"Es miserable que algunos se paren sobre una pandemia para rapiñar votos. Los políticos de altura deben tener la capacidad de generar acciones a partir de propuestas. Lo mejor que le puede pasar hoy a un político es apoyar medidas que mitiguen la pandemia, no hacer la de Bolsonaro, que convirtió a Brasil en un desastre humanitario internacional" recomendó.

"Uno lee a un sector del periodismo, y también escucha a un sector de la salud que están en esa embestida, intentando decir ‘no hagan nada’. El viernes hubo una campaña vergonzosa de aquellos que dicen defender el republicanismo, pidiéndole a la gente que incurra en desobediencia civil" cuestionó el doctor Atienza.

"Y la gente no le respondió, respondió al gobierno. El pueblo argentino muy responsablemente acató las medidas y eso fue un golpe muy duro para ellos. Está muy mal buscar votos miserablemente entre muertos" dijo.

Tanto detractores como defensores de los argumentos del doctor Atienza señalaron en las últimas horas que un video suyo en Youtube fue clave para la determinación que tomó el presidente de la Nación sobre la presencialidad en las escuelas.

"Tengo entendido que sí, que de algún modo ese video influyó. El martes de la semana pasada compartí panel con algunos de sus asesores en la Academia Nacional de Ciencias. Lo que no es cierto es que haya hablado conmigo. Deben haber tenido en cuenta mi opinión, como los gráficos de Martín Barrionuevo o la opinión de toda la gente que hace ciencia para después tomar las decisiones" relató.