Nokia decidió poner en circulación el Nokia 1100 en el año 2003 por unos 100 dólares, o 114 euros de la época. En el año de su lanzamiento el 1100 competía con el Nokia 6600, con pantalla a color, con el Ericsson P900 con su suerte de mezcla entre PDA y teléfono móvil, o con la BlackBerry 6230, uno de los más vendidos de aquel año.

El 1100 nunca fue un teléfono con unas capacidades espectaculares pero sí que cumplía con lo que por entonces se pedía a un teléfono móvil. Un equipo con función linterna, con hasta 36 tonos para elegir, y el famoso compositor de tonos de Nokia para almacenar hasta 7 tonos creados por nosotros. Cómo olvidar el Snake II, el mítico juego de la serpiente.

También ofrecía otras funciones como cronómetro, calculadora o una función chat. Todo lo que necesitamos.