Cerca del 13% de todas las muertes en mayores de 35 años en la Argentina pueden atribuirse al consumo de tabaco. En nuestro país, 1 de cada 5 jóvenes de entre 13 y 15 años fuma y es más común entre las mujeres que en los varones (21,1 vs. 17,6%). Además, el 35,3% estuvo expuesto al humo de cigarrillo en sus hogares y un 43,7% en espacios públicos cerrados. Aún queda mucho camino por recorrer para disminuir el tabaquismo en la población.

"Para lograr esto, hay muchas medidas que se pueden tomar y que, de hecho, vienen implementándose: prohibir las publicidades de tabaco, aumentar el precio de los cigarrillos para que sean menos accesibles y promover ambientes 100% libres de humos de tabaco, entre otras, pero fundamentalmente debemos educar a la población, incorporando a la currícula de los colegios la importancia del cuidado de la salud", enumeró Castillo Costa.

"Esto abarca distintos aspectos, como la alimentación saludable, la importancia de realizar actividad física diaria y el control de los factores de riesgo. Estos cambios en el estilo de vida no solamente ayudan a prevenir síndromes coronarios agudos, sino que también disminuyen las probabilidades de desarrollar un ACV, insuficiencia renal y enfermedad cardiovascular periférica, entre muchas otras. El beneficio es muy significativo", concluyó.