El viernes inaugura una "casa popular" en homenaje a Valeria Cazola
Luego de una década, una familia mutó el dolor que produjo un femicidio en la decisión de brindar contención y apoyo a mujeres en situación de vulnerabilidad y por ese motivo se disponen a inaugurar la casa popular Valeria, en homenaje a Valeria Soledad Cazola, asesinada en junio de 2008.
El acto se llevará a cabo este viernes a las 18 en el inmueble ubicado en Fassina 1931, de barrio Sarmiento Norte, donde funcionará ese nuevo espacio, con la finalización de un mural, la actuación de murgas locales y una feria.
"En realidad, nosotros siempre trabajamos con mujeres solas y con menores en los barrios porque trabajamos en el barrio Matadero, en el barrio Isaura, en el barrio Eucaliptus y hasta la zona de Corpi", expuso María Rodríguez casada con Pedro Cazola, tío de Valeria y pastor de la comunidad anabautista menonita de nuestra ciudad.
La casa popular Valeria se propone como una "casa abierta a todo público pero principalmente a las mujeres, para que sea un lugar de encuentro, de apoyo para aquellas mujeres que vengan con problemas; es el trabajo que estamos haciendo en el barrio y a partir de ahora vamos a tener una sede".
El lugar dispone de variadas comodidades para desplegar las actividades, ya que "son dos casitas. Esa casa era de mi suegro y mi suegro siempre le dio lugar a todos los hijos: adelante es una casita con una habitación, baño y cocina-comedor; y la de atrás tiene dos habitaciones, cocina-comedor y un baño y patio", expuso Rodríguez.
Un femicidio
El caso del femicidio de Valeria Cazola se produjo el 12 de junio de 2008, cuando la joven de 24 años fue asesinada de cinco puñaladas en un pensionado de la calle Alberdi y por el caso fue detenido su novio.
Aparentemente, una violenta discusión mantenida por la pareja el jueves a la madrugada derivó en la tragedia. Pero pasó casi un día hasta que la policía encontró al asesino llorando junto a la cama donde yacía la joven , y aunque intentó escapar fue arrestado.
La víctima fue identificada como Valeria Soledad Cazola, y el principal y único acusado Jorge Alberto Villanueva (23). Ambos compartían desde hacía pocos días una pequeña y humilde habitación en avenida Alberdi 2744. Ella tenía tres hijos pequeños de una relación anterior y una vida difícil.