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@JosefinaB

El jueves se publicó en el sitio de la Municipalidad de Olavarría el Boletín Oficial de marzo. El inicio del documento, de más de 700 páginas, es una fe de erratas: en la edición de enero "se omitió" la publicación de seis ordenanzas y en la actual edición se reparó tal falta.

Más allá de que es imposible que no se cometan errores en tamaño volumen de publicación, hay algunos que llaman la atención por su repetición a lo largo del tiempo. A esto se suma la ausencia de cierta información en las normativas, situación que no puede vincularse a "un estilo" de redacción.

A modo de ejemplos se pueden verificar los decretos 1.013 y 1.015 del último boletín publicado en los que se otorgan sendas eximiciones de la Tasa de Servicios Urbanos por todo el año y de la Tasa de Seguridad e Higiene entre enero y mayo, pero en ninguno de los casos se explicita quién es el beneficiario aunque sí se exponen las causas de la exención.

La redacción de cada uno de estos decretos permite inferir que se trata de un error, que el espacio previsto para completar con la identidad del beneficiario en cuestión no fue llenado. Sin embargo, la reiteración del mismo error a lo largo del documento en las normativas del mismo tipo resulta llamativa.

En el caso del Boletín Oficial del mes de enero, un relevamiento de EL POPULAR encontró 88 decretos de otorgamiento de subsidios en los que no se detallaron los beneficiarios. Se trata de montos de entre 850 pesos y 8 mil pesos que se pagan por plazos que van de un mes a ocho meses de este año. En enero, correspondió a erogaciones por unos 300 mil pesos. Los mismos son entregados a través de programas de Atención a Personas con Necesidades Básicas Insatisfechas -en 85 casos- y para Atención Integral de la Violencia de Género -en 3 casos-.

Ante una consulta de este Diario, se planteó que en cuanto a las víctimas de violencia de género se considera la posibilidad de no exponer públicamente su identidad con lo que quedaría explicada la omisión.

Más allá de esta situación puntual, la gran cantidad de decretos como los ya mencionados en los que se omite información da cuenta de, al menos, falta de interés y valoración para con la documentación pública del Municipio.