"''Donde termina el humor, comienza el campo de concentración'' ", escribió un célebre dramaturgo francés... y creo, dio en el blanco", plantea Juan Carlos Leguizamón, el reconocido humorista "Guile".

Y agrega en una columna que analiza estos años que "una idea un poco vanidosa hace tiempo sacó abono en mi cerebro -o al menos en la minúscula parte que uso de él- hoy convertida casi en obsesión: la intención de mostrar un modelo del habitante olavarriense, como la persona que vive, sobrevive o persiste en vivir en su ciudad porque la ama y, por sobre todas las dificultades, la quiere ser alegre".

"Pero en los últimos tramos de este lapso del año que transitamos, pareciera que vamos con melancólica certeza hacia un ''algo'' que nos devorará. Y ya casi no sonreímos. ¿Por qué no?".

"Hace algo más de 40 años asumí el compromiso de dibujar una sonrisa en cada uno de los olavarrienses, a través de un cuadrito que pretende ser humorístico (''Guilerías''). Y hoy cumplo 15 mil publicaciones en esa intentona".

"Quince mil días frente al tablero... ¡es un buen rato!

"En los negocios, en las oficinas, en las calles, en las reuniones... las sonrisas parecen dibujadas. Las charlas de vecinos todos los días, son ''pálidas'' que se suman y multiplican como células malignas que van deglutiendo el organismo y pone en las caras la expresión del vecino del cóccix. Es como si el demonio económico que nos dio vuelta los bolsillos, nos hubiera también extirpado el buen humor".

"Si nos hemos erguido luego de verdaderas catástrofes, son semejante experiencia no tendríamos que recorrer las calles con la fragilidad de quien espera un sacudón del globo terráqueo".

"Entiendo que no vamos a arreglar el mundo a carcajadas, pero un bocado de buen humor es perte del salario que tenemos a dieta. ¡Por favor, sonría! Aún en la adversidad. No me haga remar solo en el mar de las ''malas caras'' ".

"Dios conoce cada problema que tenemos y ante El la soberbia resulta intrascendente".

"Imaginemos que a partir de mañana todos los problemas serán resueltos, para convencernos que los imaginativos ganarán el cuelo porque lo están imaginando".

"A los lectores de EL POPULAR y a la empresa editora, ¡15 mil gracias!". Guile