Después de todos los contratiempos que han debido soportar las autoridades, personal docente y no docente y alumnos de la Facultad de Ciencias de la Salud durante el frustrado proceso de ampliación y reformas de la sede sobre la avenida Pringles, a mediados de octubre comenzará a cerrarse unos de los capítulos más traumáticos desde su creación. 

La presentación del enfermero español Francisco Paredes Garza fue un momento propicio para conocer el estado de situación. La empresa Wayro fue desligada de una obra que -en su primer día- ya soportó un grave accidente eléctrico con uno de los operarios, y siguió con incumplimientos contractuales, falta de pago de haberes, protestas, medidas de fuerza, paralización de los trabajos, intervenciones de distintos ministerios, y padeció como corolario violentos incidentes en el mismo predio universitario. 

"Afortunadamente la situación ha mejorado. El 17 de octubre se abrirán los sobres de la nueva licitación, así que esperemos la asignación de las obras a una nueva empresa y reanudar los trabajos lo antes posible" dijo el doctor Trebucq. 

Si bien el proyecto no sufrirá alteraciones, hay algunas cuestiones de forma que fueron modificadas para esta segunda etapa. "La obra dura un poco más de un año y medio, y es lo que hay que calcular desde que se reanude. Lo que sí, se hará una metodología distinta, cumpliendo etapas" anticipó. 

"Se intervienen 4000 metros cuadrados, de los cuales 2000 se construyen y 2000 se reciclan. Algo ya está hecho y a partir de eso se irá por etapas: en la primera los sanitarios, la segunda una nueva aula, la tercera el comedor y los laboratorios, y la última etapa todo lo que es el primer piso" narró el doctor Trebucq. 

"Eso nos permitirá un seguimiento más prolijo, al saber que cada etapa se empieza y se termina" rescató. La volatilidad de la economía argentina también hizo mella en las reformas del edificio de la Facultad de Ciencias de la Salud. "Se duplicó y un poco más el presupuesto" informó. 

"En esto hay que destacar las gestiones llevadas adelante por las autoridades de nuestra Universidad, por nosotros desde la Facultad y por el Ministerio de Obras Públicas de la Nación, que realmente nunca se bajó de esta batalla, por decirlo de alguna forma" reconoció. 

"Hubo que desafectar una licitación, con todo lo que eso implica, y se hizo en tiempo récord. Así que por eso estamos muy contentos y agradecidos con el acompañamiento del Ministerio" añadió. 

Si bien se activaron seguros de caución, el doctor Trebucq evitó hablar del curso legal que tomó la relación entre la UNICEN y la empresa contratista Wayro Ingeniería SA. 

En el cierre de la charla, el decano se refirió a los efectos de estos contratiempos en el desarrollo de las cursadas: "Se nos mezcló con la pandemia, en la que tuvimos un protagonismo muy participativo".  

"Acá no se paró nunca la actividad académica. Nosotros tenemos lugar en nuestras aulas para casi 500 estudiantes y además contamos con la sesión por parte del Municipio del Centro de Convenciones para poder cursar, lo que son como 350 lugares. Así hemos podido seguir normalmente con las cursadas" indicó el doctor Trebucq. 

"Por eso yo decía, cuando arreciaban las críticas sobre la obra, que es mejor poder cursar con lo que tenemos que no cursar. Nosotros seguimos adelante; seguimos graduando estudiantes tanto de medicina como de enfermería, y aportando profesionales para este momento de salud tan crítico que vivió el país, y el mundo, con la pandemia"  

"Se fueron adecuando las condicionalidades, las correlatividades. Como en todo el país la tasa de graduación bajó a la mitad, pero nada que ver con este problema" finalizó.