Un año antes, el 13 de julio de 1948, se había conformado la Fatlyf, con la participación de 29 organizaciones gremiales. Entre 1943 y 1948, escasos cinco años, los trabajadores de la electricidad habían logrado forjar una organización sindical de alcance nacional, poderosa y respetada, partiendo prácticamente de la nada.

En efecto, en 1943, existían solamente dos sindicatos de Luz y Fuerza: Tucumán (con 24 años de existencia) y Rosario (con 15 años), que habían perdurado gracias al esfuerzo y el sacrificio de hombres luchadores, que luego promovieron la formación de otras organizaciones en todo el país.