Creada en 1966, la Dante Alighieri (ubicada en Dorrego 2851, 1er. piso) propone un gran oferta para quienes quieren tener acceso al aprendizaje de la lengua de la Península Itálica: por un lado, los cursos regulares (que abarcan de 1º a 5º año, con la variante de integrar el 1º y el 2º grado en un solo año); los cursos intensivos y los cursos de conversación (avanzado), en horarios de la mañana y la tarde, de lunes a jueves.

Las clases comenzarán el 15 de marzo y la inscripción será desde el 1 hasta el 12 del próximo mes, a través de las redes sociales Facebook e Instagram.

Quedan pospuestos este año los cursos para viajeros que duraban tres meses y permitían adquirir aquellos conocimientos indispensables para desenvolverse en caso de viajar a Italia; en un contexto de pandemia donde los viajes ya no forman parte de la agenda de quienes planificaban volar.

El ciclo de cine que formaba parte de las propuesta de la Dante Alighieri también debió suspenderse, ya el año pasado cuando por decreto presidencial se impulsó el aislamiento social, preventivo y obligatorio como premisa principal para evitar los contagios que hicieran colapsar el sistema sanitario.

En nuestra ciudad, quienes se acercan al aprendizaje del idioma italiano son en su mayoría olavarrienses de entre 30 y 50 años, y lo hacen por distintos motivos: están quienes lo hacen por haber adquirido la ciudadanía italiana; o por ser descendientes de inmigrantes y para estar en contacto con familiares de Italia; también porque planean viajar a la Península; y mucha gente que tiene tiempo libre y quiere hacer algo que les guste.

Los cursos de italiano de la Dante son "de idioma y cultura", decía su máxima referente, la profesora María Laura Macellari años antes, en tiempos de normalidad, y en estas mismas páginas. 

Es que junto con el idioma, los conocimientos de cultura, historia y ciudades italianas ocupan un lugar importante en el aprendizaje; una característica que forma parte de la Asociación desde hace años.

Sin dudas será un 2021 diferente, pero con la experiencia ganada de meses sobrellevando la pandemia y la virtualidad. "Hubo que reacomodarse de golpe", dice ahora la profesora María Laura Macellari.

Y analiza que "me sorprendió gratamente el resultado de los alumnos. Se prepararon clases especiales y se las ingeniaron para poder cumplir con todo. Los profesores también buscaron estrategias para motivar y acompañar".