El bloque del concejal Martín Lastape dio a conocer su iniciativa que, seguramente, llevará un debate en el recinto con las fuerzas referenciadas en el oficialismo nacional.

La propuesta, un proyecto de resolución, es una expresión de la postura del bloque y una solicitud "al Gobierno Nacional" para que "revea la decisión tomada con respecto al tema planteado considerando el grave perjuicio económico que medidas idénticas han producido en la economía argentina".

En ese sentido se pidió enviar una copia del proyecto, en caso de que salga aprobado, "al Presidente de la Nación, al Ministro de Economía, al Gobernador de la Provincia de Buenos Aires, al Ministro de Desarrollo Productivo, al Ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, al Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas, a la Sociedad Rural Argentina".

Los riesgos

Mediante el proyecto, la UCR se hizo eco de las expresiones de los dirigentes del sector agropecuario. "Estas medidas inconsultas alejan la promesa de diálogo que el gobierno muchas veces manifestó, así como también desalientan a los productores por la desconfianza que inspiran" sostuvo el unibloque.

Asimismo, se resaltó que el año pasado el rubro exportaciones de carne alcanzó "la cifra record de 800 mil toneladas por las cuales ingresaron dólares por 3 mil millones" al país.

Se cuestionó que "este tipo de medidas ya se aplicaron en el pasado y no lograron frenar la inflación, sino todo lo contrario, ya que el precio de la carne al mostrador aumentó en medio de una caída significativa de la oferta, como consecuencia del cierre de las exportaciones".

Cabe recordar que, justamente, ese es el objetivo declarado del Ejecutivo Nacional para aplicar el cierre de exportaciones por 30 días y que, como respuesta, el sector agropecuario declaró un paro sectorial por una semana el cual ya ha comenzado y que se extenderá por la semana próxima.

Para el radicalismo, "el cierre de exportaciones de carne vacuna provocará un resultado que es conocido: pérdida de confianza en nuestros mercados de destino, el que nos llevó años reabrir, pérdida de ingresos para el país, pérdida de puestos de trabajo, pérdida de inversiones y stock en la cadena ganadera. O sea, el camino inverso al desarrollo y crecimiento".

Más adelante, se consideró también que "con estas nuevas restricciones peligran 100.000 puestos de trabajo, una tragedia sumada a la actual situación económica de un país que proyecta una inflación del 50 % y el desempleo y la pobreza no dejan de aumentar".