Ley de humedales: continúa la campaña de Greenpeace para que sea sancionada la ley
Este proyecto obtuvo el dictamen de la Comisión de Ambiente y continúa en espera en la Comisión de Asuntos Agrarios. Leonel Mingo, coordinador de la campaña de Greenpeace aseguró que se debe abordar este tema de manera urgente en diálogo exclusivo con El Popular.
Desde hace varios años existe una campaña desde Greenpeace para que se sancione una ley destinada a proteger los humedales que son constantemente amenazados por actividades como la ganadería, los proyectos inmobiliarios y la minería. Más de 13 han sido los proyectos presentados en el senado según Leonel Mingo, coordinador de esta campaña, y hasta el momento solo uno ha logrado avanzar.
En las redes sociales es común ver publicidades de esta campaña solicitando firmas y donaciones, incluso realizan llamadas telefónicas en las que intentan informar a la comunidad de estos hechos y conseguir de esta forma más donaciones para la causa.
"Hace más de 10 años que se está dando vueltas con un proyecto que de una vez proteja a los humedales y no se logra avanzar" expresó con preocupación Leonel en diálogo exclusivo con El Popular.
Actualmente el único proyecto que está avanzando, de todos los que se han presentado, es el de Leonardo Grosso que es el presidente de la Comisión de Ambiente de diputados.
Sin embargo, ahora el proyecto se encuentra en la Comisión de Agricultura, la cual, según el coordinador de la campaña, "seguramente sera la más dura porque los grandes opositores del proyecto de ley de humedales vienen principalmente de este sector, ellos lo han manifestado de forma abierta".
Leonel indicó que según la óptica de Greenpeace, los proyectos de ley de humedales tienen que cumplir 3 grandes ítems. El primero es la terminación del inventario de humedales del país. "Es imposible poder proteger un ecosistema que ni siquiera se sabe donde está ubicado, cual es su extensión y cual es su estado de conservación o deterioro" alegó.
El segundo es que se establezca una moratoria, es decir, "impedir que se avance en la destrucción de humedales hasta tanto no se termine el inventario". Estos dos primeros ítems se encuentran presentes en el proyecto de ley.
El tercer punto tiene que ver con una sanción para aquellas personas que destruyen deliberadamente un humedal, para que sea considerado un delito penal. "Estas personas tienen que ir presas porque si no hay una sanción que sea equivalente a la destrucción ecosistémica y social que están generando, van a seguir destruyendo" remarcó Leonel.
Este último punto fue retirado del proyecto de ley para lograr el dictamen de la Comisión. Mingo indicó que "este ítem que para nosotros es de los mas importantes porque sino la ley queda muy bonita pero en la práctica no se cumple". Para esta causa se han conseguido un total de 118.700 firmas.
"Creemos que el cambio sistémico y a largo plazo se genera con la participación y concientización ciudadana" destacó el coordinador de la Campaña. Además agregó que "no es simplemente una firma en una lista" ya que con cada una de ellas se genera un reclamo, a nombre del firmante, para la persona a la que se está reclamando, que en este caso son diputados y diputadas del congreso.
Aquellos interesados en sumarse a la Campaña podrán hacerlo desde la pagina web de Greenpeace, que cabe recordar, se sustenta con el aporte de sus socios.
¿Para qué sirven los humedales?
Leonel Mingo señaló que no son solo ecosistemas lindos que están para apreciar su belleza sino que "principalmente su gran bondad es que funcionan como un filtro natural del agua" ayudando a su potabilización.
Indicó también que los humedales sirven como reguladores en época de sequía y/o inundaciones, ya que éstos, como los bosques, son como una esponja natural que captan y retienen el agua.
"Cuando hay una sobreabundancia de agua con lluvias torrenciales, capturan ese agua haciendo que los efectos de las hipotéticas inundaciones sean menores, y en épocas de sequía toda esa agua acumulada la va largando de a poquito para que los efectos de la sequía no sean tan fuertes" explicó.
Asimismo mitigan los efectos del cambio climático. Los humedales, al igual que los bosques, retienen el dióxido de carbono y lo mantienen capturado dentro de sí mismos mientras están vivos, por lo que al ser destruidos estos gases se disparan a la atmósfera.
Incluso funcionan como barrera de protección de incendios. Por esta razón el coordinador expresó con preocupación que este tema se debe abordar de manera urgente ya que "es doblemente nociva la destrucción de un humedal".