Maggio: "La reinvención tiene que ver con plantear la docencia como una acción colectiva"
"Volvamos a apasionarnos" fue uno de los mensajes que ofreció ayer la Dra. Mariana Maggio al presentar "Educación en Pandemia". La actividad fue organizada por la Facultad de Ciencias Sociales, la Escuela Nacional Adolfo Pérez Esquivel y Mosqueteros ? Tecnología Educativa.
La charla se llevó adelante a través de YouTube, y fue organizada por la Facultad de Ciencias Sociales, la Escuela Nacional Adolfo Pérez Esquivel y Mosqueteros – Tecnología Educativa; con la adhesión del Programa de Docencia en el nivel Superior dependiente de la Secretaría Académica y el Área de Sociales Virtual de la FACSO.
En el panel de apertura y debate participaron la decana de la Facultad de Sociales, Lic. Gabriela Gamberini; el Secretario de Extensión, Bienestar y Transferencia de la Facso, Lic. Nicolás Casado; la directora de la EnapeNAPE, Patricia Bavio; el Lic. Maximiliano Peret, docente investigador de la FACSO e integrante de Mosqueteros - Tecnología Educativa; y la Lic. Florencia Bellomo, del Equipo Orientador Escolar de la Enape.
Un horizonte de transformación:
procesos colectivos
En el marco de esta charla desde el área de Prensa de la Secretaría de Extensión de la Facso se entrevistó a la Dra. Maggio, quien invitó a repensar los procesos de enseñanza en todos los niveles, con el desafío inmediato de la virtualidad y la inclusión escolar.
"La aceleración que produce la pandemia creo que en el primer año todavía no termina de generar prácticas de rediseño", manifestó Maggio en relación con sus propuestas de "reinvención" en los términos de "una enseñanza más contemporánea, que reconozca las tendencias culturales que atraviesan nuestras vidas, nuestras nuevas formas de entretenernos, de socializarnos, una escuela que pueda reconocer estos fenómenos culturales y generar diseños que los incluyan".
Detalló así que, de acuerdo con los análisis realizados durante 2020, "en la primera etapa hubo mucho esfuerzo para poner a disposición materiales, pidiendo un poco la responsabilidad al otro lado de la pantalla, lo cual no necesariamente está bien. En la segunda parte del año hubo mucho énfasis en lo sincrónico, en decir: ‘Si hay acceso entonces creemos un encuentro sincrónico y la gente se encuentra ahí’". Cuestionó sin embargo que "si el docente explica no está cambiando el modelo" y menos aún si los "estudiantes están conectados 3 ó 4 horas escuchando las clases teóricas de un docente que podría estar en un video".
Fue justamente "en los límites de estas etapas" donde la investigadora encontró que empezaban "a emerger otras posibilidades. Y para mí siempre aparecen de la mano de procesos más colectivos, donde docentes que se preguntaron ‘y ahora que hacemos’, dijeron ‘lo que hagamos, hagámoslo juntos’". Y amplió esta situación al trabajo colectivo entre y con los propios estudiantes.
"Entonces creo que ahí aparece una escena nueva de posibilidad respecto de la reinvención que para mí tiene que ver básicamente con plantear la docencia como una acción colectiva. Y que los docentes hayan empezado a usar más masivamente las plataformas tecnológicas es una buena noticia porque ese es el lugar donde también se pueden encontrar y pueden co-crear. Ahí creo que puede haber un horizonte inspirador respecto de la enseñanza que viene", refirió Maggio.
Reconocer las tendencias culturales
Una de las barreras que se debieron romper durante la pandemia en muchos casos fue que los docentes puedan acercarse a los espacios y redes sociales en las que sus estudiantes se comunicaban y relacionaban.
"Hace rato que vengo sosteniendo que estamos bastante alejados de nuestros estudiantes, en la medida que fueron abrazando ciertas tendencias culturales, que tienen que ver con las redes sociales o con los videojuegos, tienen que ver con nuevas formas de comunicarse, y la realidad es que nuestras propuestas en las escuelas encontraban esto bastante poco", indicó Maggio.
"Creo que ahí casi te diría que la base de una educación contemporánea tiene que ver con reconocer las tendencias culturales de las que los sujetos que educas participan. En ese sentido muchos docentes, con esfuerzo, dijeron ‘por qué no me muevo ahí y veo lo que está pasando’. Y cuando lo hicieron encontraron que de repente estaban mucho más cerca de los estudiantes que si generaban propuestas en Instagram o en Tik Tok que si insistían subiendo materiales a los campus", manifestó.