La inteligencia artificial llegó al sector agropecuario para ponerse a su servicio en un mundo de información en el que todo es posible. Ante este desafío, Microsoft y el INTA se asociaron para fortalecer el agro y dotarlo de tecnología innovadora.

Procesar la información que genera en Argentina que cosecha millones de toneladas de granos y carnes al año parece una meta difícil, pero no inalcanzable.

Para resolverlo, resultan clave algunos conceptos que hacen referencia al procesamiento de grandes cantidades de números y cifras como Big Data o inteligencia de datos junto con la minería de datos y la inteligencia artificial, que se suman, además, a la Internet de las cosas o IoT –la conexión avanzada de dispositivos, sistemas y servicios– y Machine Learning –técnicas que permitan a las computadoras aprender–.

Cuarta revolución

Para Ezequiel Glinsky, director de Proyectos de Transferencia Digital de Microsoft Argentina, "estamos frente a la 4ª Revolución Industrial de la mano de la innovación". En este sentido, aseguró que "el futuro del campo pasa por la innovación tecnológica".

En esta línea, Carlos Di Bella –director del Instituto de Clima y Agua del INTA Castelar– argumentó que "es necesario transformar los datos en información de calidad e integrarla a otras en modelos que faciliten la toma de decisiones eficientes y estratégicas que ayudan a reducir la incertidumbre".

Por su parte, Fernando Riccitelli –gerente de Informática del INTA– destacó la incursión del organismo en el mundo de estas tecnologías altamente disruptivas. "Concretamente estamos pensando en desarro llar proyectos de Machine Learning a fin de generar modelos basados en el triángulo de la enfermedad: ambiente-huésped-patógeno".