En estos años, los femicidios dejaron miles de niñas y niños huérfanos y algunos de ellos están obligados a convivir con los asesinos. El problema es de todos y de todas. La solución hay que construirla en conjunto. Necesitamos sumar compromisos para cambiar una cultura que tiende a pensar a la mujer como objeto de consumo y descarte y no como una persona autónoma.

Este lunes unas 400 personas se reunieron en otro aniversario de aquella primera e histórica manifestación que se desarrolló un día como hoy, pero del 2015. Murgas, presentaciones artísticas, canciones, sonrisas, abrazos y lágrimas. Y juntas. Cerquita, sosteniéndose para que estas realidades en las que en nuestro país, casi muere una mujer por hora, cambie.

Que las políticas destinen más dinero de sus presupuestos para dar soluciones y que la justicia profundice sus veredictos -o que revea otros- fueron algunos de los pedidos que se oyeron durante la lectura de documentos.

El femicidio es la forma más extrema de esa violencia y atraviesa todas las clases sociales, credos e ideologías: Pero la palabra "femicidio" es, además, una categoría política, es la palabra que denuncia el modo en que la sociedad vuelve natural algo que no lo es: la violencia machista. Y la violencia machista es un tema de Derechos Humanos, leyó Erica Rivas -actriz- en la histórica primera marcha del 2015 tras el asesinato a Chiara, una joven de 16 años que fue encontrada en el patio de la casa del novio.

Una gota que colmó un vaso que ya había rebalsado hace tiempo, y que desde el 2015 no deja de gritar y de pedir por vida, por derechos y por más respeto.

"Si no marchamos juntas nos matan por separado" dijo una señora de unos 40 y pico de años, junto a una nena que podría ser su hija. La gran mayoría no sólo fue porque es una manera más de expresar lo que piensa y lo cree, sino "por las que vienen, para que tengan un mundo más equitativo" dijo una señora más mayor, que podría ser la abuela de muchas de las jóvenes que encabezaban la marcha y empujaban el grito.

Olavarría volvió a marchar. Tras las presentaciones artísticas sobre el Paseo Jesús Mendía y la lectura de un documento elaborado por la Red de Profesionales de la Salud de Mujeres por el Derecho a Decidir, en relación a las muertes por el aborto ilegal que se producen, se presentó un mural.

Sí. Un montón de personas -en su mayoría mujeres de todas las edades- se reunieron para gritar "Vivas Nos Queremos", y muchas de ellas también, dentro de "esa vida", pidieron por la despenalización del aborto, que en los últimos tiempos es otra razón por la que mueren muchas de ellas. A este 3 de Junio también lo abrazó una gran "marea verde".

La cobertura completa y los detalles en la edición impresa de este lunes del diario El Popular.