El viernes último, se conoció que las bibliotecas populares de la provincia de Buenos Aires atraviesan una grave crisis como consecuencia del atraso en el pago de cuatro meses de subsidios por parte del Gobierno provincial, por lo que está en riesgo la continuidad de varios establecimientos.

"El atraso en los pagos es permanente. El Gobierno nunca se pone al día y eso genera que las bibliotecas reciban intimaciones por parte de la AFIP y se atrasen en las cargas sociales, mientras que también hay puestos de trabajo en riesgo porque esos fondos se utilizan para pagar los salarios de los bibliotecarios", describió el presidente de la Federación de Bibliotecas Populares, Luis Zurueta, quien lamentó que existe un "enorme desinterés de la clase política" en la problemática de los establecimientos. En tanto, desde el Ministerio de Cultura provincial señalaron a esta agencia que los pagos se destrabarán "esta semana".

Zurueta señaló que a raíz de las demoras en los últimos años cerraron unas 70 bibliotecas, de las casi 500 que había en la provincia, y que muchas otras están en riesgo. "Es tal el desinterés del Gobierno que disolvieron la Dirección de Bibliotecas del Ministerio de Cultura", agregó.

Con el subsidio de la provincia, las bibliotecas alcanzan a pagar entre el 20% y el 30% del total de los salarios, que en algunos casos se completan con los aportes de la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (Conabip).

"La realidad es que los legisladores que integran las comisiones de Cultura tampoco se han ocupado de la problemática y no han atendido nuestros reclamos", indicó Zurueta.

Asimismo, volvió a pedir por la reglamentación de la ley provincial de bibliotecas (Nº 14.777), que fue aprobada por unanimidad el 16 de octubre de 2015, y que busca reemplazar el antiguo decreto ley 9319-1979, firmado en años de la dictadura cívico-militar. "Se están haciendo los distraídos con la reglamentación, porque llevarla adelante implicaría más recursos para las bibliotecas", sintetizó. Es que uno de los objetivos de la normativa es justamente estructurar un fondo para que el sistema de administración financiera no demore en girar los subsidios.

A nivel local

En Olavarría, seis de las 14 bibliotecas existentes reciben el subsidio provincial destinado al salario del bibliotecario, que "todavía está atado a los acuerdos paritarios docentes, por lo que hace más de un año que se ubica en 10.513 pesos con 80 centavos", indicó Galbán. El último pago recibido fue marzo, por lo que "abril, mayo, junio y ahora ya está corriendo julio que no sabemos qué suerte correrá". Claro que "supuestamente la semana pasada un grupo de bibliotecarios de la zona de La Plata y del Gran Buenos Aires se reunieron con una coordinadora, porque ya no hay ni siquiera un director dedicado a lo que son las bibliotecas populares, sino una coordinadora que está en el Instituto Cultural y se comprometió a que esta semana iban a salir" los pagos de abril.

En nuestra ciudad, las seis bibliotecas que reciben el subsidio provincial son La Popular Armando Collinet, la Coty Laborde, 1º de Mayo, Héctor Amoroso, Sierras Bayas e Independencia, quienes cumplen con sus obligaciones con diferentes alcances de acuerdo con la realidad de cada una de ellas.

"Es lo mismo que pasa en el resto de la Provincia: todos tenemos distintas realidades, aunque nosotros desde el año pasado tenemos la subvención municipal, que durante este año se está cumpliendo en tiempo y forma, ya que contra la rendición del mes anterior, el Municipio abona el mes corriente", explicó Galbán en referencia a la ordenanza de protección, desarrollo y fomento de las Bibliotecas Populares, aprobada, vetada por el DE y luego ratificada por el HCD durante el transcurso del 2016.

Se trata de una suma mensual que supera los 8 mil pesos, y que, "directamente relacionada con el salario básico municipal, ante la falta de acuerdo paritario, tampoco ese monto se ha modificado: es el mismo que tenemos desde el año pasado, desde que se otorga el subsidio". Además de las seis entidades mencionadas, que cumplieron con su inscripción en el Registro de Entidades de Bien Público Municipal y también en el Registro de Personas Jurídicas, lo están tramitando otras tres: Helios Eseverri, Crucero General Belgrano y Sarmiento de Hinojo.

De alguna manera, las actividades periódicas que despliegan más la suma aportada por la Comuna, contribuye con las instituciones olavarrienses que, en su mayoría, pagan salarios a mes vencido. En el caso de la 1º de Mayo, por ejemplo, "hemos cancelado el mes de junio con su respectivo sueldo anual complementario. Sin embargo, terció Galbán, "en la Provincia hay muchas bibliotecas que hasta que no reciben la subvención bonaerense no se lo están pagando al bibliotecario. Algunas están trabajando menos horas, porque aunque lo fijado es para seis horas diarias, que completan 30 semanales, con 10 mil pesos, ¿cómo se hace frente a un salario con todos sus aportes?", se preguntó el referente de la 1º de Mayo. Y finalizó con que "en otras localidades, algunas bibliotecas ya están cerrando, sobre todo por el tema de las tarifas, que en algunos casos son impagables y otras que alquilan, también tienen problemas serios".

Varios roles

_NOTA

El presidente de la Federación provincial de Bibliotecas Populares, Luis Zurueta, valorizó que estos establecimientos no tienen fines de lucro y que cumplen un rol cultural y también social, porque en muchos de ellos además de ofrecerse talleres y distintos servicios, se dicta apoyo escolar y funcionan comedores. No obstante, esas actividades ahora están en riesgo.

En declaraciones al diario La Verdad, el presidente de la Biblioteca Popular "Florentino Ameghino" de Junín, Luciano Toledo, resumió: "Estamos mal y la situación ya es crítica desde hace un tiempo. Todo se acentuó con la asunción del nuevo gobierno, la desarticulación de la Dirección de Bibliotecas y el atraso de los pagos de los subsidios con que se abonan los sueldos". En ese sentido, lamentó que comenzaron a cobrar un mínimo arancel para poder sostener algunas de las actividades y talleres.

En Tandil, en tanto, el fin de semana pasado se organizó una feria americana a beneficio de la biblioteca Sarmiento. "Se hace muy difícil de sostener si no está eso (el subsidio), lo que se suma al aumento de tarifas que hemos tenido", dijo Brian Urban, presidente de ese establecimiento.

En La Plata, en tanto, peligra la continuidad de la biblioteca Popular Infantil y Juvenil Túpac Amaru.