En un acto de defensa del medio ambiente y la salud pública, un grupo de vecinos de Olavarría ha presentado una nota formal al Presidente del Honorable Consejo Deliberante, Guillermo Santellán, denunciando la persistente contaminación en las aguas del Arroyo Tapalqué.

La nota, fechada el 4 de marzo de 2024, detalla que desde septiembre de 2022 se han realizado múltiples denuncias públicas sobre la contaminación del arroyo, identificando tres fuentes principales: la Planta Depuradora Coopeléctric, las Cárceles Sierra Chica y el basurero local. Los ciudadanos resaltan que esta situación representa un riesgo para la salud pública, ya que el agua contaminada no solo se utiliza para el consumo sino también para actividades recreativas en el balneario municipal.

En marzo de 2023, análisis bacteriológicos confirmaron la presencia de coliformes fecales y bacterias asociadas a desechos cloacales en el agua, superando los niveles permitidos y poniendo en evidencia la gravedad de la situación. Los vecinos acusan a las autoridades políticas de negligencia e indiferencia frente a esta crisis ambiental y sanitaria.

La comunidad de Olavarría, que ha seguido de cerca el caso, agradece a los medios periodísticos locales por dar visibilidad al problema y ayudar a concientizar sobre los riesgos a los que están expuestos. Los firmantes de la nota, Fabián Rodríguez y Martín Acosta, manifiestan que no cesarán en su reclamo hasta que se neutralicen todas las fuentes de contaminación y se denunciará a cualquier funcionario público por incumplimiento de deberes si no se toman medidas.

Los vecinos instan al Consejo Deliberante a tomar cartas en el asunto en la próxima sesión ordinaria, solicitando al Ejecutivo Municipal la apertura de los medios necesarios para remediar la contaminación del arroyo, en una lucha contra años de desidia y corrupción política y empresarial.

La nota subraya la urgencia de la situación y la necesidad de que las autoridades tomen responsabilidad por la protección del ambiente y la salud de la población. Este llamado a la acción pone de manifiesto el poder de la comunidad cuando se une por una causa común y el imperativo de preservar los recursos naturales para las presentes y futuras generaciones.