Al tener en cuenta que un autobús de linea interurbana tiene una ocupación de 45 pasajeros, se concluye que en horarios de máxima demanda, está permitido que más de medio centenar de personas viajen en un solo coche. Distinto es el caso de los colectivos de la línea urbana, quienes tienen capacidad para transportar 22 personas sentadas. A ello hay que sumarle que todas las unidades de transportes deben tener sus ventanillas abiertas, con el fin de que haya circulación de aire. Además el documento deja claro que todos los ocupantes del vehículo deberán tener cubierta la nariz, boca y mentón.

En Olavarría se implementaron distintos protocolos en las empresas que prestan servicios en la ciudad, algunos coinciden. "El protocolo es desinfección de asientos, manijas, antes del recorrido cuando arranca la primera vuelta" contó Enzo Russo, director de Transporte de la Municipalidad. Estas medidas de higiene del coche, se realizan con cierta periodicidad en cada uno de los turnos.

En cuanto al transporte además de la limpieza antes del comienzo de la jornada, los choferes poseen un tiempo libre en un espacio que ellos denominan "cabecera", es un descanso personal, que lo utilizan para la limpieza de los vehículos. "Cada media hora llegan a una cabecera, es más lo usan cuando no hay flujo de gente, cuando creen que es necesario" explicó Pablo Magnifesta, inspector de la empresa Tu Bus.

Ramiro Di Giano, socio Gerente de Ola Bus, habló del rol de los protocolos, y recalcó "lo más importante y que se tiene que cumplir sí o sí para acceder al colectivo y permanecer en él es el uso de barbijo o tapabocas en todo momento".

Por otra parte, los voceros de las empresas hablaron de la situación económica del transporte, en estos momentos de pandemia y con el comienzo de las clases semipresenciales. Se mostraron esperanzados, pero cautos: "esperanza creo que sí, pero es muy paulatina. La esperanza viene de brindar buena información", aclaró Mangifesta en relación a llevar tranquilidad a los pasajeros para que no teman a la hora de usar el transporte público.

Para Di Giano, la recuperación económica será lenta y además "habrá que calibrar con mucha precisión la demanda con la oferta" expresó.

Para tranquilidad de los usuarios las empresas de transportes aclararon que al realizarse las tareas de desinfección, las frecuencias no sufrirán mayores atrasos. En cuanto al servicio urbano, implementaron el aumento de la cantidad de colectivos para poder paliar con un posible incremento de pasajeros. Se agregó un coche por cada una de las líneas, con el objetivo de que las frecuencias tengan un lapso de tiempo no mayor a 30 minutos. Y en el interurbano se agregaron 10 servicios repartidos en diferentes días, horarios y localidades.

En cuanto a posibles contagios de los choferes hay diversas precauciones que se toman en cuenta tanto para evitarlo, como así también para posibles casos de COVID-19. Mangifesta expresó que en Tu Bus "tenemos al ingreso de la empresa para tomar la fiebre, en el caso de tener síntomas el chofer ese día lo avisa y obviamente no toma servicio", una tarea que se realiza a diario con todos los conductores de los colectivos.

Ahora bien, en caso de que se presente alguna sintomatología en horario laboral, "se tendrá que parar el micro, avisar a Ojos en Alerta. Recordemos que todos los choferes habían realizado la capacitación de Ojos en Alerta" explicó Enzo Russo.

Los conductores de los colectivos saben que en estos casos deben frenar y dar aviso para que el personal de salud pueda asistirlos.

Pasajeros cómodos y seguros

Todos los protocolos son los que ya se implementaron desde el comienzo de la pandemia, en la actualidad cada rubro y cada actividad tiene sus propias medidas de seguridad.

Distintos pasajeros del transporte público contaron a EL POPULAR sus sensaciones al momento de utilizar el colectivo diariamente. Es el caso de Dana de 15 años, quien expresó sentirse segura y agregó "no nos pedían más nada, vos te subís, pasás la sube y te sentás, nada más".

Por su parte Tomás de 17 años, contó que se volvió frecuente para él la utilización del transporte público para llegar hasta la escuela. Además señaló: "lo primero que hago al subir al colectivo es ojear por arriba los lugares que están libres, preferentemente los lugares de un solo espacio o donde no haya nadie". Y que cuando ve que el vehículo se llena, "opto por ir parado hasta que alguien deje su lugar libre" expresó.

Matías tiene 12 años, y para él viajar en colectivo es una experiencia nueva. "Creo que con las medidas sanitarias voy a estar bien, no voy a sentarme al lado de alguien por el distanciamiento social", motivo por el cual expresó su preferencia a viajar de pie.