Los coches de pasajeros dejaron de funcionar hace casi cuatro años con la promesa gubernamental de su pronta restitución, pero en enero de 2018 llegó la noticia menos esperada: el servicio iba a ser dado de baja, según reza un informe publicado ayer por la web del diario La Nueva de Bahía Blanca.

Esto fue un golpe para poblaciones como Coronel Pringles, Cabildo, Laprida, Saldungaray y Sierra de la Ventana. Lejos de callarse la boca, vecinos e instituciones comenzaron a movilizarse y peticionar para que la medida fuera revertida, pero todos sus reclamos cayeron en saco roto.

Con el cambio de gobierno en la Nación y la Provincia se retomaron las gestiones con mejores expectativas, aunque esta vez la gestión será distinta: se realizará a través de cámaras de comercio, para después sumar municipios y concejos deliberantes, y desde allí traccionar el pedido hacia las altas esferas gubernamentales.

El reclamo se hace fuerte en el impacto económico que la medida causó en todas estas poblaciones, además de la lógica pérdida de conectividad entre ellas y hacia ciudades como Bahía Blanca, Olavarría o Capital Federal.

"Estamos viendo que algunos ramales se están activando y que hasta se están reconstruyendo algunas vías. Por nuestra parte, ya estamos moviéndonos para ayudar a la toma de decisiones. Somos los afectados los que tenemos que manifestarnos", dijo a "La Nueva" Jorge Canolik, del grupo de vecinos #QueVuelvaElTren.

La idea, explicó, es que todas las localidades afectadas trabajen en forma conjunta, partiendo desde las cámaras de comercio e involucrando a las instituciones intermedias, para sumar adhesiones en cada una de estas poblaciones. Lo mismo ocurrirá con los intendentes y concejos deliberante.

Además, volverán a realizarse eventos culturales en las estaciones.

Por el ramal Pringles solo funciona un tren de carga, que pasa hasta seis veces al día. Las vías están en mal estado.

Para ello y por el momento, se están distribuyendo cartas para sumar adhesiones a nivel local, para recién después elevar el pedido a las máximas autoridades de la Provincia y la Nación.

Canolik sostuvo que debe ser la propia gente de Pringles, Laprida, la Comarca Serrana y Cabildo que deben ponerse al frente del reclamo.

El sector turístico de la Comarca Serrana fue uno de los más perjudicados por el corte del servicio de tren de pasajeros y encomiendas en estas localidades. "Ha caído el caudal de gente que nos visitaba, sobre todo aquellos que utilizaban el servicio de cámping para alojarse", dijo Canolik.

También explicó que la baja del servicio de encomiendas también complicó al comercio minorista y a muchas familias que lo utilizaban para la compra de mercadería.