Programa Giro: los vecinos plantean que "percibimos una mejora, pero no es lo que buscábamos"
Los vecinos mostraron su beneplácito por la restitución de un día en la frecuencia de recolección de residuos, pero piden el regreso al esquema tradicional y un mejor diálogo entre las autoridades del Municipio y la comunidad.
Daniel Lovano - [email protected]
A menudo el ruido suele ser un compañero molesto de las propuestas de cambio, y éste apareció en un sector geográfico específico de la Ciudad con la puesta en funcionamiento del programa municipal GIRO (Gestión Integral de Residuos Olavarría): el Barrio San Vicente.
La controversia nació como derivación de la medida que le quitó dos días en la frecuencia de recolección de residuos a la zona, y se modificó un tanto a partir de las protestas de un sector de la comunidad, que incluyó más de un centenar de firmas en el pedido de rectificación.
Las autoridades recogieron el guante, devolvieron uno de los días reclamados, y hace una semana comenzó el nuevo calendario de recolección según GIRO en la zona piloto.
Esta abarca las avenidas Avellaneda y Pueyrredón, entre Lavalle y las vías, junto con las dos manzanas entre la avenida Avellaneda y Giovanelli y entre Lavalle y Riobamba.
También involucró el sector demarcado entre las avenidas Pueyrredón y Del Valle y las calles Rivadavia y Lavalle.
Así, el nuevo calendario de recolección para unos 2000 hogares del barrio San Vicente comprendidos por GIRO quedó estipulado de la siguiente manera: lunes deben sacar la basura a la vereda, martes los reciclables, miércoles la basura, jueves los compostables y viernes la basura.
"Ha cambiado", reconoció Horacio Agosta, uno de los vecinos del sector que encabezó la protesta, pero advirtió que "no era lo que queríamos".
"Esta postura es a título personal y luego de algunas reuniones que hemos tenido con los vecinos. Evidentemente ha habido un cambio, percibimos una mejora, pero no es lo que buscábamos" comentó Agosta.
"Insistimos en que tiene que haber una devolución de las frecuencias en su totalidad, porque no hay ninguna razón para implementar un sistema de recolección de residuos como ellos lo hicieron, y a la par disminuir la frecuencia de recolección. Una cosa no tiene nada que ver con la otra" opinó.
Agosta anticipó que los vecinos de San Vicente insistirán en su posición. "En eso nuestra postura es inamovible", dijo.
Agosta y un grupo de vecinos se reunieron semanas atrás con Julio Valetutto (secretario de Desarrollo Económico de la comuna) y Emilia Díaz (subsecretaría de Empresas e Inversiones) y del encuentro salió un pronunciamiento relevante, según el vecino.
"Ellos mismos nos reconocieron que van a tener que poner un freno con la extensión del programa porque no tienen la planta de tratamiento en condiciones como para soportar el volumen de residuos que genera la Ciudad. Ni más, ni menos es lo que veníamos sosteniendo nosotros para el caso de los 2.300 hogares y unas 6 mil personas que representa el barrio San Vicente" señaló.
Agosta acotó que en la reunión ratificaron la postura de mantener la frecuencia tradicional.
"Ellos dijeron que iban a evaluar la situación. Acá no existe ninguna especulación política detrás de esto, sino que somos un grupo de vecinos que estamos haciendo un reclamo como corresponde ante las autoridades, tanto a los concejales como al Ejecutivo" explicó.
Remarcó que "hay un cambio evidentemente; la gente lo tomó con beneplácito y expectativas, pero fue algo arrancado. No es que vinieron las autoridades del gobierno municipal y nos restituyeron las frecuencias, sino que los vecinos protestaron, se unieron, se movilizaron y consiguieron que al menos reconozcan un día, pero no era lo que nosotros esperábamos".
"Seguimos pidiendo, y eso está más que claro, la frecuencia en su totalidad como antes de implementar al programa GIRO, y después, para la separación -como tantas veces lo dijimos- pretendemos que haya más acercamiento a la gente y más interacción como para llevar adelante un programa de estas características" sostuvo.
En tal sentido, apuntó que "así como está no lo pueden trasladar en forma adecuada a la planta, y por lo otro se trata de un programa en el que los vecinos deberían estar comprometidos casi en su totalidad".
Agosta aludió también a que en los próximos días uno de los bloques de la oposición va a presentar un pedido de informes "como para que respondan a todas las preguntas y todos los cuestionamientos que estamos haciendo, y que eso quede plasmado institucionalmente".
Según dice la página oficial del programa GIRO, Olavarría fue elegida para este ensayo a partir de que la Fundación Delterra.org lanzo un concurso durante el 2019 en el cual participaron muchas municipalidades del país.
En éste se exigían determinados requisitos que de alguna forma reflejaran el interés y la preparación de cada municipio para desarrollar un proyecto de semejante escala.
Subraya el texto que "Olavarría demostró ser una de las ciudades más avanzadas en temáticas de sustentabilidad, no sólo por las actividades que ya la Municipalidad venía desarrollando, sino también por el interés de la comunidad en el tema. Es por eso y por cumplir con todos los requisitos que se eligió como ciudad piloto para este proyecto".
En cambio, el ex concejal Marcelo Latorre (anfitrión de los vecinos de San Vicente en una de las reuniones con ediles opositores, en el local de la Corriente de Pensamiento Bonaerense) dio otra versión y días atrás en estas mismas páginas habló de "un proyecto impuesto, que no es sentido como propio por los vecinos, y además es fogoneado por una multinacional que ya tiene intereses en otros lugares de la Argentina, Brasil y otros países de Latinoamérica, con el mismo modus operandi: haciendo lobby para reducir lo que más se pueda la frecuencia en la recolección de residuos".