El hecho se registró este sábado apenas pasado el mediodía y en el kiosco estaba atendiendo una mujer sola. A ese lugar ingresó un hombre con casco y con un arma la amenazó y obligó a entregar el dinero que había en la caja.

La persona se apoderó de unos 500 pesos en efectivo y obligó a la mujer a quedarse en la parte de atrás del local. Le quitó, además, su celular personal y cuando se retiró desconectó el monitor de la PC y se lo llevó.

La joven, asustada y en estado de shock por los nervios vividos, salió del lugar a la calle para pedir auxilio y llamar a la Policía.